Juan Pedro Damiani recordó el día que se tomó a golpes de puño con Hugo de León

Juan Pedro Damiani habló en extenso con el programa Las voces del fútbol de El Espectador Deportes, y sobre el final de la nota contó una anécdota a pedido del periodista Julio Ríos, quien le hizo hablar del día en que se tomó a golpes de puño con Hugo de León. “Me tocó el timbre. Le tengo mucho respeto a Hugo”, comenzó narrando.

“En ese momento yo estaba de presidente de la AUF. No sé si Eugenio [Figueredo ]estaba enfermo o dónde carajo estaba. Fui a un programa de los domingos de mañana, no sé cuál, y en ese momento me dijeron que en Italia nombraron a Hugo de León técnico de la selección. ‘Qué raro. Creo que lo resolvemos en la calle Guayabos, pero no creo que sea De León’, dije yo, y me calenté. Después vino Juan Ramón Carrasco”, recordó sobre ese episodio en 2003.

“Yo estaba comiendo en casa un domingo con mis viejos, mi hermana y mis sobrinos. Y la señora que trabaja en casa me dice: ‘Lo llama Hugo’. Y como tenía un cuñado que se llamaba Hugo, le dijo: ‘Huguito, ¿cómo andás?’. Y ahí me dice: ‘Soy Hugo de León. ¿Qué te crees?’ Y me relajó todo. No puedo decir las cosas que le dije”, agregó.

“Me dijo: ‘Te voy a ir a buscar’. Y le dije: ‘venite acá’. La cosa es que a las tres horas sonó el timbre y era Hugo de León. No había más alternativas que agarrarnos a piñazos”, contó sobre uno de los máximos ídolos de la historia de Nacional, en el medio de sus dos pasajes como entrenador tricolor. El primero fue desde enero de 1998 hasta diciembre de 2001, y el segundo de agosto a diciembre de 2004.

“Yo tenía un casero que colaboraba en el jardín y otras cosas. Era peruano y fusilero naval, y siempre estaba armado. Y me dijo: ‘Yo lo iba a ejecutar’. ¡Imaginate si limpiaban a Hugo de León ahí! Enseguida cayó Chijane y nos separó. Me gusta Hugo porque va para adelante y dice lo que siente. Lo respeto”, expresó.

“Después hubo otros inconvenientes por una película que le recomendó a mi viejo y yo le recomendé otra, pero los contaré otro día”, concluyó.

Antes, habló de la incursión de Flavio Perchman como vicepresidente de Nacional. “Lo conozco del otro lado del mostrador, como empresario, y es de los tipos más serios y más inteligentes, y ganador. Lo quiero mucho como persona. El tema es que es difícil estar de un lado del mostrador y pasar del otro, como les pasó a [Daniel] Pasarella y [Juan Román] Riquelme. Antes cobrabas y ahora pagás”, sostuvo.

“Le dije que no se exponga tanto. No veo presidentes de clubes hablando tanto. En el caso de Flavio, que es muy transparente, no habla con casete y es terriblemente auténtico, eso le juega en contra, porque hay técnicos que no quieren que se les metan en esas cosas”, afirmó.