Las calles de Napoli se inundaron durante la madrugada de este jueves de hinchas partenopeos celebrando la consecución del tercer Scudetto de su historia, el primero sin Diego Armando Maradona y después de 33 años sin conseguirlo.

Con dos focos principales como los aledaños del estadio Diego Armando Maradona, en los que celebraron las casi 55.000 personas que acudieron a ver el partido ante el Udinese (1-1), y la céntrica Plaza del Plebiscito, Napoli no tuvo ni una sola calle en la que no hubiera un aficionado celebrando el título italiano desde que terminara el encuentro.

Toda la ciudad estuvo en la calle con banderas, bufandas y camisetas. Una ciudad en la que el humo de las bengalas y el que dejan las motos también fue protagonista, nublando la vista en una larga noche.

Y es que esta noche poco les importó a los napolitanos que este viernes fuera un día laborable. Esta noche lo único que importaba era celebrar que se había hecho historia y que la ciudad volvió a ser campeona de Italia.

Pero no solo fueron las calles, es que el cielo también estuvo festejando y teñido de colores por los incontables fuegos artificiales que tenían cabida al mismo tiempo desde diferentes puntos de la ciudad, que no solo ofrecieron el espectáculo visual sino que ayudaron con el sonido a generar esa sensación de que la ciudad estaba más despierta que nunca.

Foto: CIRO FUSCO / EFE

Sin embargo, un hombre de 26 años murió en la madrugada de este jueves por heridas de bala durante la celebración del Scudetto en la que también hay, por el momento, otros tres heridos. El joven fue ingresado en el hospital Cardarelli, donde falleció poco después a causa de unas heridas de bala, según informaron los medios locales.

Otros tres hinchas fueron también heridos de bala en la plaza Garibaldi, cercana a la estación central. Además, tres aficionados más fueron ingresados en el hospital por heridas causadas por petardos o bengalas.

Foto: CESARE ABBATE / EFE

El plantel llegó este viernes por la tarde italiana a la ciudad sureña, pero los jugadores no fueron a la ciudad deportiva, sino que llegaron a sus casas directamente desde el aeropuerto.

La delegación de gobierno de Napoli, junto al presidente del club, Aurelio de Laurentiis, decidió durante la semana que el avión llegara el viernes por la tarde en lugar del jueves de madrugada por motivos de seguridad y, además, cambió el aeropuerto para que Capodichino, destino habitual y el aeropuerto más importante de la ciudad, no quedase bloqueado.

La expedición al completo, que celebró por su cuenta en Údine mientras la ciudad partenopea explotaba de alegría, aterrizó sobre las 16: horas de Italia, mientras que en Castel Volturno, lugar en el que se encuentra la ciudad deportiva, se aglomeraban alrededor de 2.000 hinchas para ver su llegada.

Sin embargo, sobre las 17:20, cuando los parciales volvieron a cantar de alegría -y a prender las bengalas que han protagonizado los festejos- al ver acercarse a sus ídolos, solo pudieron ver al técnico, Luciano Spalletti.

Ninguno de los jugadores que estuvo este jueves en el campo y que consiguió pasar la historia llegó a la ciudad deportiva. Todos se fueron en taxi a sus casas directamente desde el aeropuerto militar de Grazzinasa en el que aterrizaron.

Los jugadores volverán a la ciudad deportiva este sábado para preparar el choque ante el Fiorentina del domingo en el Estadio Diego Armando Maradona, en el que hinchada y jugadores celebrarán por primera vez juntos el Scudetto.