River Plate dio la nota al derrotar 2-1 a Liverpool de forma agónica en el Parque Saroldi y cortó una racha de siete partidos consecutivos sin ganar. El equipo de Julio Ribas dejó al de Joaquín Papa sin chances de jugar la final del Intermedio y salió del último puesto del descenso.
El primer tiempo fue entrecortado, aunque con chances para ambos lados ya que no había marca en la mitad de la cancha. Los primeros intentos fueron remates de Renzo Machado en Liverpool y de Juan Cruz de los Santos en River, recién promediando los 15 minutos de juego.
Llegada la media hora, ocurrió una incidencia clave en el encuentro. Liverpool se quedó con diez jugadores cuando un error de Martín Rea en la entrega parecía ser capitalizado por el atacante Faustino Barone, quien, en el momento en que se perfilaba rumbo al arco, fue derribado por el propio defensor negriazul, que vio la tarjeta roja.
Desde ahí llegó un centro de pelota quieta que fue a parar a la cabeza de Christian Almeida, quien puso el 1-0 a los 35 minutos. Tras el gol, Julio Ribas sorprendió mandando a la cancha la primera variante: la salida del amonestado Emiliano Jourdan y el ingreso de Facundo de León.
El comienzo del complemento fue chato. Sin embargo, a los 65’, Martín Rabuñal filtró dentro del área para el argentino Nicolás Vallejo, quien se dejó caer reclamando infracción de Lautaro Pertusatti. Renzo Machado acomodó la pelota para ejecutar, pero sin embargo fue Abel Hernández quien se encargó de cambiar el penal por gol.
Sobre el final, un golazo de Tiziano Correa le dio el triunfo agónico a River, que salió del último puesto de la tabla del descenso y cortó una racha de siete partidos sin ganar. Liverpool, en tanto, se quedó sin chances de jugar la final del torneo.