Intermedio: Nacional derrotó 2-1 a Racing, que terminó con ocho, en el Parque Viera

Nacional derrotó 2-1 a Racing, que terminó con ocho jugadores en el Parque Viera, duelo por la cuarta fecha del Intermedio y llegó a diez partidos seguidos con victoria, seguirá como líder solo de la Anual y pone presión a sus perseguidores.  

El partido comenzó con los albos tomando las riendas del trámite y teniendo una primera llegada que inició Petit y terminó en un disparo de Mereles que sacó al córner Amadé.

Fueron momentos de predominio y generar brechas por las bandas, teniendo en una de Otero, más una llegada del Ojito Rodríguez con definición de Petit, otras buenas intervenciones del golero.

Y sobre los 18 llegó el golazo de Mereles, grito ahogado por le VAR. Un pase largo para el pique del Diente López por izquierda terminó con una buena corrida, pase a Otero por el medio que asistió al juvenil y este sacó tremendo zapatazo que se anidó en las redes. Bandera en alto del linea y un trazado de líneas bastante irrisorio por el ángulo utilizado, anularon todo.

Recién allí, pasados los 20' aparecieron dos respuestas del local. Mateo Cáceres se lanzó sobre la defensa y la pelota derivó en Santiago Ramírez que perdió el mano a mano con Suárez, algo que se repitió instantes después con un tiro libre ejecutado por el mismo futbolista.

Allí se dio otra decisión polémica cuando un patadón de Alex Vázquez sobre Nicolás López obligó a unja revisión del VAR por posible tarjeta roja. Plancha clarísima que el ofensivo se encargó de magnificar mostrando la marca de los tapones en su pierna, pero Matonte decidió mostrar solo la amarilla.

A los 31' se dio otra clarísima. Un centro de Otero por derecha terminó con un cabezazo de Boggio por el centro del área y la pelota reventó el palo y salió, cuando el meta solo miraba.

Es más, el venezolano con tremendo zapatazo volvió a hacer entrar en acción a Amadé y en el rebote Mereles le erró al arco, en otra situación desperdiciada para quebrar la paridad.

Lo que el árbitro desestimó minutos antes se concretó después por la vía de la doble amarilla, con otra falta fuerte de Alex Vázquez que le valió la segunda amonestación y posterior roja. Poco pasó desde ahí al cierre de esa primera etapa que se fue sin goles.

Roja y roja

En el complemento se dieron cambios en los dos, ingresando Hugo Silveira y Felipe Cairús en los de Sayago, mientras que Peirano sacó a Mereles para apostar a Lucas Villalba.

El partido era luchado, pero con el protagonismo de un rojo para la ocasión que iba decidido por ese gol que rompiera el bloque defensivo rival. Eso se vio intensificado cuando Agustín Pereira, por una falta sobre Otero, vio una polémica segunda amarilla y posterior roja para dejar a su equipo con nueve. 

Gabriel Báez y Mauricio Pereyra a la cancha por Nicolás Rodríguez y Luciano Boggio, los nuevos movimientos de Peirano a los 57', sabedor que tenía todo a favor.

Y esto le dio gran resultado porque una pelota quieta a los 63' encontró a Báez en el área que definió con calidad, venció a Amadé y colocó el 1-0 que noqueó a su rival.

Esto se acrecentó cuando a los 65' Matonte le mostró la roja a Gastón Bueno tras una acción defensiva en el que termina increpando al árbitro y este inmediatamente le muestra la tarjeta que dejó al Albiverde con ocho jugadores en cancha. 

Y todo fue tricolor, dominio, situaciones y nuevas variantes como el ingreso de Herazo y Jeremía Recoba. Justamente estos dos se asociaron para el segundo, acción que se completó con asistencia del colombiano a Nicolás López que no falló para el 2-0. 

Una falta sobre Espinoza generó un tiro libre que Mateo Cáceres, de muy lejos, colocó sobre el palo izquierdo de Suárez que no llegó a sacar y colocó el 2-1 que dio algo de emotividad al cierre.

Lo cierto es que fueron los tricolores los que estuvieron más cerca del tercero en la adición al punto que Recoba con un tiro reventó el palo, en la última profunda del duelo.

Tres puntos más para Nacional, que llegó a diez partidos con victoria, todos los que dirigió Peirano a nivel local, algo clave a pesar de pasar por momentos irregulares en los cotejos.