El equipo de Juan Ramón Carrasco sorprendió con un atípico 4-4-2, explotando la velocidad de sus extremos. Ensanchando la cancha complicó en el primer cuarto de hora con una incursión de Kaique que terminó en un débil remate a las manos de Dawson, y a los 8’ un bombazo de Agustín Alfaro dio en el travesaño.

El propio Alfaro, que complicó en el mano a mano con Giovanni González, metió un centro que encontró muy solo en el corazón del área a Roberto Fernández, pero el cabezazo del mediocampista albivioleta salió desviado ante la pasividad de la retaguardia aurinegra.

Peñarol reaccionó impulsado por Joaquín Piquerez, que le dio salida por izquierda. El lateral exigió a Guillermo de Amores con un buen intento de media distancia a los 10’ y reventó el horizontal a los 22’, cuando capturó a pocos metros del área un despeje del fondo local.

Después de esas llegadas de un lado y otro el dominio pasó a ser mirasol, aunque sin profundizar. Christian Bravo insinuó pero no concretó por derecha, y Giovanni González se soltó al ataque pero fallando en la definición.

El primer tiempo capicúa terminó con otra llegada clara de Fénix a los 41’. Juan Álvez trepó por derecha y metió un centro rasante que por el segundo palo conectó Alfaro, cuyo zurdazo dio en el vertical. Luego Dawson le ahogó el grito a Nequecaur.

Golpazo

En el complemento los mirasoles trataron de adelantar líneas y buscar opciones para quebrar la paridad, ante un rival que apostaba su carga por la izquierda y que mostró falencias en la última zona rival cuando fue a fondo.

Con Bravo sin poder desnivelar por la banda y Facundo Torres controlado, Peñarol buscaba con centros al área sin mayor acierto, por lo que apostó al banco de suplentes para buscar opciones.

Pero los de Carrasco a los 83' le dieron el golpe de gracia a los mirasoles, cuando un penal pitado por Riveiro, tras una mano inexistente de Giovanni González donde se ve claramente que el balón rebota en la cara, le dio la gran chance.

El argentino Luciano Nequecaur tomó la posta y con un disparo seco infló las redes para el 1-0 que bajó las cortinas del juego.

Si bien los de Saralegui trataron de inclinar la cancha en el cierre, volvieron a carecer de presencia ofensiva para vencer a De Amores y se cerró el 1-0 que volvió a tumbar a los carboneros.

Peñarol quedó hundido en el grupo "B", le da la gran chance a Nacional de seguir escapando en la anual y el Uruguayo esta cada vez más empinado.