Gustavo Poyet tuvo el peor debut posible como entrenador del Sunderland, equipo que está último en la Premier League con siete derrotas en ocho presentaciones y apenas cinco goles a favor contra 20 en contra. Después de casi dos semanas dirigiendo al plantel y buscando aprovechar el receso por Eliminatorias, tomó el cargo que dejó vacante Paolo Di Canio y cayó 4-0 en su visita al Swansea, en lo que significó la peor goleada de sus dirigidos en el torneo.

Sunderland, que venía de hacer un digno papel en su derrota 2-1 frente al Manchester United, presentó un 4-2-3-1 que por momentos se convirtió en 4-3-3 y fue ofensivo. De hecho, el primer tiempo fue equilibrado y el equipo de Poyet fue algo superior, más allá de que no hubo una gran cantidad de situaciones de peligro.

Sin embargo, en unos pocos minutos del segundo tiempo llegó el descalabro. Sobre los 56’ el holandés De Guzmán puso un corner en el área, peinó el defensor español Ángel Rangel y el escocés Philip Bardsley, del Sunderland, se llevó puesto el esférico y venció su propia meta justo el día en el que volvía a la titularidad después de mucho tiempo.

Apenas dos minutos después del 1-0 llegó el segundo, con un tremendo bombazo de De Guzmán al ángulo, y un penal de Gardner sobre Britton le permitió al irlandés Wilfred Bony poner el 3-0. Por si fuera poco, el español Chico metió el cuarto tras un nuevo tiro de esquina y abrochó una goleada dolorosa para los dirigidos por el primer técnico uruguayo que llega a la Premier League.

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