La NB I, la principal liga de fútbol de Hungría, retornó a la actividad el sábado de la semana pasada con un partido atrasado y cumplió con otro encuentro pendiente el miércoles. Ambos cotejos se jugaron sin público, pero al día siguiente la Federación Húngara de Fútbol autorizó la vuelta de los hinchas a las tribunas con algunas restricciones.

Se anunció que los aficionados puden ingresar a los estadios dejando tres asientos libres en su fila, por lo que se puede ocupar uno cada cuatro, lo que equivale a decir que se permite ocupar el 25 % del aforo de los escenarios deportivos.

El 6-0 del Zalaegerszegi visitando al Kaposvári Rákóczi abrió la fecha 26 del certamen el viernes, y el sábado hubo tres partidos; Kisvárda venció al Ujpest y Diósgyor al Mezokovesd-Zsóry, ambos 1-0 como locales, al tiempo que el Fehévár igualó 0-0 en su visita al Paksi SE.

El domingo el Honvéd derrotó 3-1 al Debrecen como local y desde las 16:05 juega el líder, Ferencvaros, frente al Puskas como visitante.

La foto que acompaña esta nota corresponde a los hinchas del Diósgyor. Como puede observarse, la mayoría respetan el distanciamiento establecido de tres asientos pero casi nadie utiliza tapabocas.