El segundo vicepresidente de Nacional, Gonzalo Lucas, salió al cruce de las declaraciones del titular aurinegro, Ignacio Ruglio, donde hace referencia al arbitraje en un estado de WhatsApp (que luego borró) y mencionó: “Nosotros no ‘estamos cuidados’, pero así nos gusta más. No van a poder porque Peñarol es más grande que todos ustedes juntos”.
Lucas, entrevistado en el programa Las voces del fútbol (AM 1330), se refirió a los dichos del presidente mirasol sobre la mano pitada por Matonte a Santiago Homenchenko que derivó en un penal, que convirtió el Álvaro Navarro para los violetas y sentenció el 2-2 del sábado pasado: “Para mí gusto fue penal, y cuando trato de racionalizar lo que se dijo, como que esa jugada fue offside, creo que la pasión y el ego nos lleva a modificar la realidad”.
“Yo le preguntaría a Ruglio: ¿Si la jugada fuera exactamente contraria; si Defensor va ganando 2-1 y en la última jugada pasa esa jugada y no le cobran penal a Peñarol porque no hay imagen o lo que sea? ¿Qué diría Ruglio? Probablemente diría lo mismo en sentido contrario. Eso demuestra que su subjetividad le hace modificar la realidad, le genera un doble estándar”, dijo más tarde.
“Obviamente pierde credibilidad su crítica al respecto. La pasión lo hace modificar lo que ve. Seguramente para muchos eso sea así. Pero a mí me gustaría que un presidente hiciera un esfuerzo de racionalizar y no ser tan pasional, pero no me puedo meter a mandarle conductas a nadie”, dijo más tarde con firmeza.
“Seguramente Ruglio sabrá qué quiere para Peñarol y en qué forma defiende a Peñarol adecuadamente”, mencionó más tarde, y agregó: “¿Por qué pidió perdón el jugador de Peñarol a su hinchada si no fue mano? Si le pide perdón a la hinchada de Peñarol es porque asume que le pegó en la mano”.
“Claramente es una opereta, una operación, si alguien realmente piensa que Nacional está cuidado, que ha sido beneficiado en los últimos 20 años y que hay que romper todo porque están contra todos”, dijo sobre las críticas desde tiendas aurinegras a los arbitrajes, y continuó: “Ya hay muchos dirigentes e hinchas de Peñarol que se han manifestado en sentido contrario. Todo lo que le venga bien es para ponerse en guerra contra todos”.
“A mí me parece que no es lo adecuado en un presidente, que es peligroso. Pero, reitero, no puedo imponerle conductas de cómo se debe obrar, cada cual defiende a su club de la forma que entiende que es la correcta. A mí no me gusta, me genera preocupación, pero es claramente su objetivo”, cerró.