Peñarol trabaja a contrarreloj para conseguir la habilitación de Alejo Cruz, una de las cinco incorporaciones que hizo el club de cara a la segunda mitad del año, en la que tendrá la llave de octavos de final de la Copa Libertadores y el torneo Clausura.

El extremo, de 24 años, se desvinculó de Atlético Goianiense por impagos y, a través de los mecanismos que la FIFA otorga, llevó al club a juicio. Al considerarse en libertad de acción, llegó con el pase en su poder al Carbonero.

Como le está haciendo juicio, Goianiense no entregó de voluntad propia el TMS (Transfer Matching System) y, por ese motivo, Peñarol aún no ha podido inscribirlo para la Liga AUF Uruguaya ni para la Copa Libertadores, indicaron fuentes del club a FútbolUy.

El Aurinegro le pidió el TMS a la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) y esta al club, que respondió negativamente. Por ese motivo, recurrieron a FIFA, que intimó al club a presentarlo.

Esta semana vence el plazo de intimación. Si el elenco brasileño no envía el documento en tiempo y forma, entre viernes y lunes FIFA daría el “ok” para inscribir al jugador.

Si la habilitación llega entre hoy y mañana, Cruz puede ser inscripto para el clásico de este sábado (el plazo es este jueves). El 2 de setiembre vence el plazo de inscripción de jugadores para el Clausura.

El problema para Peñarol es que este viernes 8 se termina el plazo para enviar a Conmebol la lista de buena fe para los octavos de final de Copa Libertadores.

Cruz, formado en el Carbonero, ya se encuentra entrenando desde esta semana.