Italia se consagró campeón de la Eurocopa tras vencer a Inglaterra por 3-2 en la tanda de penales, ya que igualaron 1-1 en los 120' de juego en el Estadio de Wembley. Fue un golpazo para los hinchas ingleses que se ilusionaron con volver a festejar un título después del Mundial de 1966.

Una vez consumada la derrota, se dieron una serie de hechos horribles. El primero los insultos racistas que sufrieron algunos jugadores del combinado inglés (Marcus Rashford, Bukayo Saka y Jadon Sancho).

Eso no fue lo único que llevaron a cabo algunos hinchas de Inglaterra. Porque cuando terminó la final, varios fanáticos les hicieron una emboscada a algunos de los simpatizantes italianos que acudieron al Estadio Wembley.

La final contó con 66 mil espectadores y de los cuales hubo seis mil italianos. Al finalizar la historia, los ingleses fueron a buscar los visitantes y las imágenes fueron tendencias en las redes sociales.

Previo al encuentro también se registraron disturbios de los simpatizantes ingleses. En total hubo 19 policías heridos y 50 personas detenidas por todos estos incidentes, según informaron las autoridades inglesas.