Eliminatorias: Brasil venció a Argentina 3-0 de local, lidera y dejó sexto a su rival

Brasil 3-0 Argentina
Goles: 25' Coutinho, 45' Neymar, 58' Paulinho
Amonestados: Fernandinho y Marcelo (B) - Funes Mori, Otamendi y Biglia (A)
Jueces: Julio Bascuñán, Christian Schiemann y Marcelo Barraza (Chile)
Estadio Mineirao, Belo Horizonte

Brasil: Alisson; Daniel Alves, Joao Miranda (87' Thiago Silva), Marquinhos y Marcelo; Paulinho, Fernandinho y Renato Augusto; Philippe Coutinho (85' Douglas Costa), Gabriel Jesús (82' Roberto Firmino) y Neymar. DT: Tité.

Argentina: Sergio Romero; Pablo Zabaleta, Nicolás Otamendi, Ramiro Funes Mori y Emanuel Más; Enzo Pérez (46' Sergio Agüero), Lucas Biglia, Javier Mascherano y Ángel di María (71' Ángel Correa); Lionel Messi y Gonzalo Higuaín. DT: Edgardo Bauza.

El combinado verdeamarelo le dio flor de baile al albiceleste y reflejó el momento de uno y otro; mientras Brasil goza de su mejor momento en años con las cinco victorias al hilo desde la llegada de Tité, Argentina se complica como nunca en lo que va del Siglo XXl para ir a un Mundial.

Sólo en los primeros 25 minutos fue un partido parejo. Los dos priorizaron defender, casi no generaron peligro y apenas se arrimó la visita con un bombazo a distancia de Lucas Biglia que exigió a Alisson. Hasta ese momento el único apunte era el juego rudo sobre Messi de Fernandinho, que fue amonestado a los 6’ y siguió golpeando.

Pero a los 25’ se acabó todo. Neymar buscó a Coutinho y el del Liverpool metió una diagonal de izquierda al medio para abrir el score con un tremendo derechazo al ángulo. Argentina no tuvo reacción y le dio pasto a las fieras. El periodismo criticará al equipo como nunca y con razón.

Brasil se hizo absoluto dominador del juego y antes del 2-0 avisó con una apilada de Neymar por derecha que dio en el caño. Un rato después, a los 45’, el 11 del Barcelona puso el segundo picando al vacío tras un notable pase del joven Gabriel Jesús, que pese a no convertir fue figura.

Si con ese mazazo que cerró el primer tiempo pareció liquidarse el pleito, Paulinho lo confirmó a los 13’ del segundo. Fue la tercera situación de gol clara del equipo de Tité, que antes y después de ese gol le perdonó la vida al del Patón Bauza.

Neymar sacó la pizarra, guapeó ante los golpes y desnudó la impotencia de los argentinos, que en ningún momento pudieron pararlo. A ritmo de samba se floreó Brasil en el mismísimo Mineirao, ese escenario que fue testigo del histórico 1-7 a manos de Alemania.

Hoy, con un equipo que entusiasma mucho más que aquel de Scolari, Brasil mostró todo su potencial con un tridente imparable en ofensiva y dejó en ridículo a un rival que quedó sexto y tan complicado en el juego como en la tabla.