El golfista adicto a la Coca Light

Desde el 2008 ya no bebe ni una gota de alcohol, pero tuvo que sustituir su adicción por otra. El golfista comentó a The Guardian que se toma de 10 a 12 latas diarias de Coca Cola Light, aunque "antes me tomaba 26 ó 28". Eso sí, tiene que ser con hielo, sino dice que no la tolera. Considerado como una especie de "héroe del pueblo" por los estadounidenses, "Long John" como lo apodan, continúa siendo un atractivo de los torneos, pero fuera de los campos, donde se toma fotografías con los fanáticos y vende su merchandising.

Daly, de 47 años, asomó en la década de los noventa como uno de los jugadores más talentosos del mundo. Ganador de dos Majors (PGA Championship 1991 y British Open 1995), fascinaba a todos con sus larguísimos drives y su estilo descontracturado. Pero luego vino la debacle del californiano, acompañando su bajo nivel deportivo, con escándalos matrimoniales, problemas con las drogas, pérdidas millonarias por su adicción al juego y también al alcohol, que lo llevó a quedar detenido en 2008, cuando apareció borracho e intoxicado a un kilómetro del Augusta National Club. Allí mismo, muy cerca del pub Hooters, Daly vuelve a instalar su bunker en la previa de un nuevo torneo del cual no participará. "Me gustaría volver a jugar en Augusta", reconoce, pero ya solo compite en los eventos que lo invitan o en alguno de los dos grandes que ganó, por su condición de antiguo campeón.

Empresario en varios rubros, que incluyen el diseño de campos de golf y de indumentaria deportiva, también se acercó a la música a través de bandas de rock. Actualmente vive con su cuarta esposa y con su hijo de once años, al que educan en su propia casa: "al colegio irá dentro de dos años porque quiero que haga algún deporte de equipo".