La Major League Soccer, el torneo de fútbol más importante de Estados Unidos, había anunciado el pasado jueves la suspensión de las actividades por los próximos 30 días a raíz de la expansión del coronavirus.

Una semana después de aquella primera medida, se estiró el período de inactividad. Mediante un comunicado, se informó que “de acuerdo con el consejo de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de posponer durante las próximas ocho semanas los eventos en los que participen más de 50 personas, MLS ha extendido el aplazamiento de sus partidos a lo largo de ese período”.

Dada la incertidumbre respecto al calendario de una liga que al momento de la suspensión llevaba completadas apenas dos etapas de su campeonato 2020, la MLS aclaró que “sigue enfocada en jugar toda la temporada 2020 y está evaluando todas las opciones, incluyendo retrasar la final de la temporada y jugar la MLS Cup en diciembre, como lo hizo la liga antes de la temporada 2019”.

“La liga también está identificando otras fechas disponibles. A través de este proceso, la MLS continuará priorizando la seguridad de nuestros aficionados, jugadores, empleados y socios, y coordinando con las autoridades de salud pública federales y locales, así como con otras organizaciones deportivas”, concluye el comunicado.