El equipo arbitral cerró un correcto trabajo en la final del Torneo Clausura, que terminó con victoria de Nacional por 2-0 sobre Peñarol. Andrés Matonte dio fluidez al juego, mostró un correcto manejo de las tarjetas amarillas y expulsó a Enzo Martínez a los 68’ en una decisión incuestionable, dado el codazo del defensor aurinegro sobre Santiago Rodríguez.

En el estreno del VAR en el fútbol uruguayo, la primera revisión que se hizo evidente para el público, más allá de que el juez central no observó la repetición de la jugada, se dio a los 5’ ante un posible penal. Hubo un leve contacto de Enzo Martínez sobre Matías Zunino, pero no llegó a empujón. Daniel Fedorczuk, encargado del VAR, determinó que no pasó nada.

Luego hubo un despeje de Gabriel Rojas que terminó impactando sin intención en Santiago Rodríguez. La reanudación del juego también se demoró, pero no pasó nada. Lo mismo ocurrió a los 54’ en una jugada en la que todos los aurinegros pidieron penal de Luis Mejía sobre Facundo Pellistri, pero fue un choque al que llegó primero el panameño a la pelota.

La única revisión directa que hizo Matonte fue a los 89’. Fedorczuk entendió que un codazo de Pablo Barrientos sobre Rojas pudo haber sido tarjeta roja, por lo que le sugirió ver la jugada. El árbitro entendió que no era expulsión y decidió amonestar al argentino de Nacional.

Ante posibles fueras de juego los asistentes Richard Trinidad y Horacio Ferreiro siguieron a rajatabla el protocolo, que indica que deben dejar terminar la jugada si es dudosa. Una vez finalizada, levantan el banderín. En todas las que aplicaron la recomendación, acertaron.

Matonte como juez central, Trinidad y Ferreiro como asistentes, Christian Ferreyra como cuatro árbitro, Fedorczuk como encargado del VAR y Andrés Cunha y Nicolás Tarán como asistentes VAR redondearon una tarea que finalizó con un clásico sin polémicas.