Dinamarca y Túnez igualaron 0-0 en el inicio del grupo D de la Copa del Mundo, que hasta hoy no había registrado empates sin goles. El negocio lo hizo Australia, que hoy a las 16 horas debutará ante Francia y a priori se perfila como rival directo de los dos países que ya sumaron en la lucha por el segundo puesto.

En la primera mitad tuvo más la pelota el conjunto europeo, pero las situaciones de mayor peligro las generó el africano. Mohamed Drager tuvo la primera a los 11', cuando un remate suyo rozó en Andreas Christensen y casi termina en la red, y a los 23'se le anuló un gol a Issam Jebali por offside.

El propio Jebali, veloz delantero del Odense de Dinamarca, dispuso de la jugada más peligrosa del partido, pero perdió en un mano a mano que le ahogó de gran manera Kasper Schmeichel. A esa altura era la segunda situación clara en contra del conjunto danés, que casi no creaba peligro.

Recién en el complemento pudo profundizar el elenco dirigido por Kasper Hjulmand. A los 55' anotó Andreas Skov Olsen pero el gol no valió por un offside claro de Mikkel Damsgaard en la acción previa, y dos minutos después una llegada a fondo de Damsgaard por izquierda terminó en cabezazo desviado de Kasper Dolberg.

Volvió a golpear la puerta del 1-0 Dinamarca a los 69', cuando Christian Eriksen sacudió la zurda y el arquero Aymen Dahmen se lució con una gran atajada mandando la pelota al córner. De ese tiro de esquina nació la jugada más peligrosa de los europeos a partir de un primer cabezazo de Christensen y un segundo de Andreas Cornelius en el área chica que dio en el vertical.

Terminó atacando Dinamarca y defendiendo Túnez, que se salvó de un penal en tiempo adicional cuando el VAR llamó al árbitro para revisar una mano de Yassine Meriah en el área africana. El mexicano César Ramos desestimó y el encuentro terminó sin goles.