El Tribunal de Penas de la Federación Uruguaya de Basket Ball (FUBB) volvió a sancionar a Peñarol, esta vez por los hechos denunciados durante la quinta y última final de la Liga Uruguaya de básquetbol frente a Biguá.

Además del hecho más notorio, que fue el botellazo que cayó dentro de la cancha y estalló, dejando cientos de pedazos de vidrio sobre el piso del Antel Arena, hubo denuncia de los árbitros por un salivazo contra un integrante de la terna.

Se resolvió aplicar a Peñarol un castigo de ocho cierres de cancha y la quita de tres puntos, que se suma a las sanciones que ya acarreaba desde los duelos con Malvín y Aguada para un total de cinco unidades y 16 cierres del Palacio Peñarol.

Los aurinegros comenzarán la próxima Liga Uruguaya con -5 puntos en la tabla de posiciones pero tendrán la opción de abonar una multa de casi 400.000 pesos y cancelar todos los cierres de cancha.

Además fue suspendido por cuatro fechas el extranjero John Flowers, quien fue expulsado en el primer cuarto de la quinta final por una agresión a Iván Loriente.