Básquet: Peñarol fue sancionado con quita de puntos y cierre del Palacio Peñarol

El Tribunal de Penas de la Federación Uruguaya de básquetbol (FUBB) falló respecto al encuentro que Peñarol le ganó a Malvín en el quinto partido de su serie de cuartos de final de la Liga Uruguaya de básquetbol en cancha de Larre Borges, donde el cotejo quedó trunco por invasión y hubo denuncias de los jueces para los dos clubes.

Por un lado se le dio por ganado el compromiso al elenco mirasol, algo previsible considerando que estaba en ventaja por cuatro puntos y con libres a favor cuando se produjeron los incidentes que obligaron a suspender el encuentro, y que no fueron responsabilidad de la entidad aurinegra.

Por otra parte, sí se sancionó a los carboneros por los salivazos de su parcialidad a los jugadores rivales y a los árbitros una vez que se retiraban a la zona de vestuarios. Considerando los antecedentes de su parcialidad, se impuso una quita de dos puntos (que regirá en la próxima temporada por darse en medio de dos series) y una suspensión de seis fechas al Palacio Peñarol, aunque podría no cumplirse de forma efectiva.

Al no estar disponible el Antel Arena para el segundo y tercer partido de su serie semifinal, estaba previsto que Peñarol visite a Aguada el viernes (sin público mirasol) y lo reciba el martes (sin hinchas rojiverdes) en el Palacio, un escenario fijado por Tenfield. Lo del viernes no cambiará y la fijación del martes ahora está en duda.

Hoy a las 18 horas habrá una reunión en la FUBB para aclarar el panorama. Es intención de Aguada que el tercer partido cambie de estadio, más considerando que los duelos de playoffs de la Liga Uruguaya sirven para purgar cierres de cancha aún cuando se disputan en estadios neutrales.

Malvín hizo una buena defensa y pudo evitar sanciones. Argumentaron que quienes impidieron a los árbitros ver el monitor para observar lo ocurrido en la última jugada no eran hinchas, sino miembros de la seguridad de los dos clubes que no estaban identificados, y también se determinó que ni Fausto ni Nicola Pomoli insultaron a los árbitros en la puerta del vestuario de los jueces.