Barcelona derrotó a Valencia 4-2 como local en Montjuic por el cierre de la fecha número 33 de LaLiga de España, luego de un partido en el que comenzó ganando 1-0 y llegó a estar 2-1 abajo. La actuación de Robert Lewandowski, quien convirtió tres goles en el complemento, fue clave.

Los dirigidos por Xavi Hernández son escoltas del torneo, producto de 73 puntos, 22 victorias, siete empates y cuatro derrotas, a 11 puntos del líder Real Madrid. Además, quedaron prácticamente clasificados a la Champions League 2024/25, aunque, matemáticamente, aún no está sellado el pasaje.

Los de Rubén Baraja, por su parte, están octavos (fuera de zona de clasificación a copas), con 47 puntos, 13 triunfos, ocho igualdades y 12 caídas. 

El equipo locatario se encargó de abrir el marcador cuando transcurrían 21 minutos de juego: Raphinha colocó un buen centro al corazón del área para Fermín López, quien se ubicó sin marca y conectó un cabezazo que fue a parar al fondo de la red del arco visitante, defendido Giorgi Mamardashvili , que acompañó el movimiento de la pelota con su mirada.

En el minuto 27, la visita encontró la igualdad, cuando Peter González habilitó, a través de un pase filtrado, a Hugo Duro, quien picó entre los zagueros locales, el uruguayo Ronald Araujo (quien fue titular y jugó todo el choque) y el español Pau Cubarsí, capturó un gravísimo error de Marc-André ter Stegen —que le dejó servida la pelota en la salida—, quedó solo de cara al arco y empujó la pelota.

A los 36’, un saque de arco de Mamardashvili superó a toda la defensa locataria y derivó en los pies de Peter González, que, cuando quiso rematar, fue derribado dentro del área por Araujo, motivo por lo que el árbitro principal del encuentro cobró penal. Este, fue cambiado por gol por parte de Pepelu.

Cuando transcurría el primer minuto de los cinco adicionados por el juez previo al cierre del primer tiempo, el arquero Mamardashvili recibió el balón afuera del área, hizo un control largo que lo perjudicó ante la presión de Lamine Yamal y extendió su brazo para evitar que el atacante rival enfilara rumbo al arco, por lo que terminó viendo la tarjeta roja.

En el amanecer del complemento, precisamente en el minuto 49, Robert Lewandowski se ocupó de empatar el trámite. El delantero polaco se ubicó en el primer palo, recibió un centro desde la izquierda de Ilkay Gündogan mediante un tiro de esquina, se elevó y, de cabeza, infló las redes.

A falta de diez minutos para el final partido, Gündogan volvió a ejecutar un córner desde la izquierda (aunque este al corazón del área), que no logró a despejar Jaume Domènech, rebotó en la cabeza de Araujo y encontró a Lewandowski, quien remató y dio vuelta las acciones. Y, en la última jugada del encuentro, el propio Lewandowski marcó su triplete con un gran tiro libre que liquidó el duelo.