El uruguayo Luis Suárez se emocionó hasta las lágrimas al hablar con su familia tras la consagración de la Liga Española con el Atlético de Madrid donde anotó el gol que le valió el título por la victoria 2-1 ante Valladolid.

Sentado en el campo de juego, con el celular en la mano y con un llanto que mezcló la alegría de lo hecho, pero más que eso, la resiliencia puesta a disposición de su equipo tras ser dejado de lado por el Barcelona, aquella que era su casa.

Una videollamada con los seres queridos fue más que suficiente para aflojar todos esos sentimientos retenidos en una temporada donde anotó 21 goles en 32 partidos en los cuales vio acción.

"Es Suárez muchachos", dijo Simeone consultado por el uruguayo: "tuvimos suerte de tenerlo, poquísimos como él. Es todo corazón", contó para enaltecer la figura del uruguayo, que marcó a oro otro gran capítulo de una historia repleta de esta clase de superaciones.

"Sin dudas la que más sufrió todo lo que pasó fue mi familia y esta consagración es para ellos", dijo el salteño sobre sus afectos, pieza clave para acompañar una personalidad que nunca lo abandona.