Ángel di María tuvo un retiro soñado de la selección argentina este domingo en Miami, donde jugó 117 minutos de la final que los albicelestes ganaron 1-0 frente a Colombia para repetir el título de la Copa América, tres años después de haberla ganado ante Brasil en Maracaná.

“Estaba escrito. Era de esta manera y se lo dije a los chicos anoche en la cena: lo soñé. Dije que era la última Copa América y se terminaba acá. Soñé que llegábamos a la final y soñé que la ganaba y terminaba de esta manera”, dijo a la transmisión oficial.

“Tengo tantas sensaciones hermosas que estoy eternamente agradecido a esta generación, que me dio todo y me hizo lograr lo que tanto busqué, y hoy me voy de esta manera. ¿Qué mejor que así?”, se preguntó el mediocampista de 36 años.

“Parece fácil pero es muy difícil. Lo sé porque durante 11 años lo viví del otro lado, luchándola y peleándola. No es fácil llegar a las finales y ganarlas, y ahora se está dando. En algún momento tenía que pasar. Me hubiese gustado ganar una con los chicos de la anterior camada porque lo merecíamos”, reflexionó.

“Se dio en este momento por seguir insistiendo y peleándola. Estos chicos me dieron todo”, valoró, y si bien dijo no estar contento por la lesión de Lionel Messi, quien tuvo que salir en el segundo tiempo, valoró haber podido ganar sin él en cancha. “Por fin nosotros pudimos ganar y darle la alegría a él. Fue una noche redonda”, concluyó.