Diego Aranda, a sus 18 años, es un talento de la natación uruguaya con una historia de superación constante y logros increíbles que a su corta edad lo enmarcan como un referente de su generación.
No en vano el riverense fue elegido junto a la skater Julieta González como abanderado de la delegación uruguaya que nos representará desde este viernes en los Juegos Panamericanos de Asunción, evento que se desarrollará hasta el 23 del presente mes.
Ellos serán los encargados de portar el pabellón patrio durante la ceremonia inaugural del sábado, un honor que no solo refleja sus logros, sino también la dedicación y sacrificio que ha puesto en su carrera.
Por los inicios
Aranda comenzó a nadar a los seis años en la Plaza de Deportes de Rivera, en principio, sin un objetivo competitivo: “Al principio solo era por diversión, sin pensar en competir, ni en mucho más", contó a FútbolUy al recordar sus inicios.
“Empecé a mejorar poco a poco. Cada torneo, cada competencia era una oportunidad para crecer", destacó, hasta que apareció un freno en ese desarrollo: la pandemia de covid-19.
“Volví con 14 años y ahí conocí a mi entrenador, Jorge Gnazzo”, enmarcó para destacar un momento bisagra en su carrera. “Él vive en Montevideo y yo en Rivera, entonces desde los 14 años me envía la planificación de entrenamientos por WhatsApp, y yo los hacía solo en la piscina. Fue una época difícil, pero también una etapa de mucho aprendizaje y autogestión", explicó.
Así fue como en 2024, con tan solo 17 años, se consagró campeón sudamericano de mayores en los 50 metros libres de la justa realizada en Colombia. Un éxito que marcó un mojón, que sumado a sus récords y sus buenas participaciones en mundiales, hicieron que la Universidad de Virginia Tech lo reclutara con una beca completa.
El honor de ser abanderado
El hecho de que Aranda haya sido elegido abanderado para los Juegos Panamericanos Júnior es un reflejo de sus logros. “No lo podía creer”, relató de la primera sensación que tuvo al enterarse de la designación.
“Fue algo inesperado, pero al mismo tiempo muy emocionante. Es un honor poder representar a Uruguay y a todos los deportistas que formamos parte de esta selección", contó con una sonrisa en su rostro.
“Es cierto que todos somos parte de una gran delegación, pero encabezar a nuestro país en la ceremonia inaugural será muy especial, además de una gran responsabilidad”, señaló.
El riverense no se conforma con solo participar en los juegos, sino que sueña con el máximo: "Siempre hay que pelear por todo, tener esa mentalidad de dar lo mejor para representar al país e ir por una medalla importante.
En su día a día, la disciplina mental también juega un papel crucial. "La natación es un deporte donde la mente juega un rol fundamental. Hay que saber mantenerse concentrado, gestionar la ansiedad y no perder el foco", reflexionó para cerrar.
Uruguay presentará una delegación en los Juegos Panamericanos Júnior conformada por 121 atletas de los cuales 67 son mujeres y los restantes 54, varones, en 21 deportes.