Este miércoles 16 de julio se cumple el 75 aniversario de la mayor gesta del fútbol mundial, el Maracanazo, día en que Uruguay venció 2-1 a Brasil el 16 de julio de 1950 en remontada, para asegurar su segundo título mundial.
Fue ante casi 200.000 personas en un partido que dejó consecuencias de todo tipo en ambos países y que llevó a Pelé a confesar que ese día vio a su padre llorar por primera vez.
Sangre Ghiggia
Arcadio Ghiggia era solo un niño cuando su familia regresó de Italia, donde él había nacido. Entre 1954 y 1962 Alcides defendió allí los colores de Roma y Milán.
“¡Tu padre le ganó a los brasileños!”, le decían sus compañeros de la escuela en la que retomó sus estudios cuando llegó al país sudamericano. Él no entendía nada.
“Yo no sabía que era un Mundial, ni que era Maracaná. Cuando fui a casa hablé con mamá, ella me sonrió y me dijo: Hablalo con tu padre que te lo va a explicar mejor”, recuerda Arcadio entrevistado por EFE.
Foto: EFE l Gaston Britos
"”Fue un partido de fútbol en el que hice un gol y se ganó", le respondió el héroe del 'Maracanazo' y no le dijo más nada. Con el tiempo habló muchísimo más de ese tema con su padre, a quien definió como una persona muy jovial, sincera y cariñosa.
Arcadio asegura que ser hijo de Alcides Edgardo Ghiggia es fácil por un lado: "Lo llevas como un estandarte y un orgullo por el padre que tuviste en la parte deportiva y también en la parte familiar. Yo nunca lo llevé como un peso, al contrario, orgulloso de ser hijo de quien fue una leyenda del fútbol mundial".
Sangre Schiaffino
Antes de que Ghiggia remontara el encuentro a los 79 minutos, Juan Alberto Schiaffino había marcado el empate para Uruguay a los 66 de tiempo corrido. En varias oportunidades, el futbolista reconoció que no había querido poner el balón en el lugar en el que ingresó, sino que había querido rematar al otro poste.
Raúl Schiaffino, su sobrino, escuchó muchísimas veces esa anécdota e indicó que su tío era un hombre “muy honesto y muy apegado a la verdad”. También lo recuerda como una persona sumamente metódica, ordenada, puntual y sistemática.
Foto: EFE l Gaston Britos
Reconoce que ser familiar de uno de los héroes del 'Maracanazo' fue en algún punto “muy difícil” y recuerda que cuando era niño e iba a jugar al fútbol sentía la presión de todas las personas que sabían quién era. “Yo no jugaba mal, pero tampoco me destacaba. Esa presión la sentí y evité en varias oportunidades jugar al fútbol”, confesó.
También recordó que era muy chico cuando Juan Alberto retornó de Italia, donde en el período 1954-1962 defendió a Milán y Roma.
“En la medida que fue pasando el tiempo me fui dando cuenta de la magnitud de lo que había sido el Maracaná y de lo que había sido su trayectoria”, sostuvo Raúl.
Más que fútbol
Tanto Arcadio Ghiggia como Raúl Schiaffino no tienen dudas en garantizar que el Maracanazo es mucho más que un partido de fútbol. En Uruguay, el término trasciende a ese deporte.
Arcardio aprendió con su padre que es "de lo imposible hacer lo posible". Agrega que lo ocurrido hace 75 años es también "el milagro hecho realidad".
Raúl aseguró que Maracaná significa mucho. "Maracaná es sinónimo de lo se puede hacer trabajando en equipo y teniendo una actitud impresionante como han tenido todos y cada uno de los jugadores”.
Y añadió: “Pasó a ser un verbo. Ya lo hemos adoptado de esa manera y creo que va mucho más allá de lo que es la sociedad uruguaya. En el mundo entero conocen lo que es el Maracanazo”.
Acerca de los comentarios
Hemos reformulado nuestra manera de mostrar comentarios, agregando tecnología de forma de que cada lector pueda decidir qué comentarios se le mostrarán en base a la valoración que tengan estos por parte de la comunidad. AMPLIAREsto es para poder mejorar el intercambio entre los usuarios y que sea un lugar que respete las normas de convivencia.
A su vez, habilitamos la casilla [email protected], para que los lectores puedan reportar comentarios que consideren fuera de lugar y que rompan las normas de convivencia.
Si querés leerlo hacé clic aquí[+]