“El acuerdo entre Sánchez y Peñarol está. Falta la recisión con Santos”, dijo su agente

Nelson Ferro, representante de Carlos Sánchez, se encuentra gestionando la desvinculación del futbolista con su club, el Santos de Brasil, con el que tiene seis meses más de contrato. La intención del jugador es rescindir para llegar libre a Peñarol, el club del que es hincha.

“El interés de Peñarol es sabido. Estuvimos hablando ya en anteriores períodos de pases y, por distintos temas, no podíamos llegar a cumplir el sueño del Pato, que es jugar en Peñarol. Ahora estoy en contacto permanente, tratando de ver la posibilidad de rescindir el contrato con Santos y cumplir ese sueño”, dijo el contratista al programa Último al arco de Sport 890.

“Nos quedaban seis meses más de contrato y el nuevo técnico lo tenía en cuenta. No es sencillo, pero vi muy buena predisposición del presidente y de la parte financiera para poder lograrlo. Tenemos mucha confianza en que en estas horas vamos a tener algún adelanto”, agregó el empresario.

El mediocampista de 38 años recién cumplidos hará un esfuerzo económico para lograr la desvinculación del club al que llegó a mediados de 2018 y del que es el extranjero con más goles en su historia. “Esperamos, apenas logremos la desvinculación con Santos, firmar en Peñarol y que se ponga a entrenar lo antes que pueda, que es lo que quiere él”, expresó Ferro.

“Hablamos mucho y el acuerdo [con Peñarol] está. Lo único que falta es lograr la rescisión y tenemos mucha fe en que se haga. Esperemos que esta sea la última para que Carlos pueda cumplir lo que quiere”, insistió el contratista, quien se refirió a las alteraciones cardíacas que tuvo Sánchez y que no fueron más que un susto.

“Tenía cuatro días de pretemporada y estaba trabajando a la par del plantel. Fue el segundo mejor jugador testeado el año pasado, lo que muestra su excelente genética deportiva. En uno de los estudios, entrenando con máscaras, salió un pequeño problema por el que prefirieron excluirlo un par de días para analizar eso a fondo”, recordó.

“Al principio fue un shock para todos porque jamás tuvo un síntoma de nada, pero coordinamos estudios particulares en clínicas privadas de San Pablo y luego hicimos otro con la sanidad de Santos, y salió que el problema no era tal. Fue un afloje porque nos preocupó muchísimo. Hoy está apto para competir”, concluyó.