Joaquín Sánchez es el futbolista con más partidos disputados con la camiseta del Betis en la historia de La Liga de España y se ha ganado el cariño de los suyos y el respeto de los rivales. A sus 39 años sigue jugando y agrandando su leyenda con la camiseta albiverde, sin perder jamás una sonrisa que parece llevarla tatuada.
No obstante, dentro de una nota descontracturada y en la que se lo vio muy cómodo, el gesto cambió al hablar del entrenador que lo dirigió en el Valencia, que además será el que tendrá a su frente en el partido del próximo sábado.
En diálogo con el periodista Manu Carreño para el programa ‘El Larguero’, de la Cadena Ser, fue consultado por Ronald Koeman, el director para el que jugó en la temporada 2007/08. “No fue la experiencia más bonita de mi carrera deportiva”, comenzó contando el veloz extremo que defendió al Valencia entre 2006 y 2011.
“No fue una experiencia agradable, pero uno debe vivir de todo y aquello pasó en aquellos momentos. Tampoco quiero hablar de ese tema porque me duele lo que pasó allí. La pasé mal”, reconoció, y cuando le preguntaron si lo llevaría al Betis en el caso de cumplir algún día el anhelo de ser presidente, fue claro: “Ni de utilero”.
“Afortunadamente no duró mucho y pudimos salvar el año y de alguna terminarlo lo más dignamente posible, porque fue complicado”, agregó Joaquín, quien tras el cese de Koeman en aquella temporada terminó conquistando la Copa del Rey, luego de haber estado muy cerca de la zona de descenso en La Liga.
Koeman apartó del plantel a tres referentes como David Albelda, Miguel Angulo y Santiago Cañizares, a quienes Joaquín apoyó. Luego de ser cesado, el holandés criticó a Joaquín por su postura y sostuvo que “al Valencia le costó 30.000.000 euros, pero su rendimiento fue de 30”.
¿Lo saludará? Él mismo dijo que ni el hoy DT del Barcelona irá al Barcelona, ni tampoco está en sus planes hacerlo.