Contenido creado por Gastón Fernández Castro
Cybertario

Perdiendo el tiempo

Perdiendo el tiempo

16.01.2008

Lectura: 3'

2008-01-16T09:12:06-03:00
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Varios ministros y dirigentes frenteamplistas reiteraron su deseo de que el presidente Vázquez acceda a la reelección. El ministro de Turismo, Héctor Lescano (uno de los más firmes propagandistas del reeleccionismo), dijo recientemente que "ninguna alternativa puede descartarse al día de hoy", encendiendo una luz de esperanza para quienes anhelan un cambio de opinión. Después de todo, Tabaré Vázquez no es sólo el presidente de la República; es el mejor candidato que podría presentar el Frente Amplio, según todas las encuestas y analistas políticos.

La situación no deja de ser curiosa porque el presidente rechazó la posibilidad de un segundo mandato cada vez que se refirió al tema. Su última referencia fue en su trascendente discurso del 4 de junio pasado: "si tuviera el altísimo honor de que se me propusiera para ir a una eventual reelección, no lo aceptaría", dijo entonces Vázquez. ¿Puede esperarse un cambio en la decisión presidencial? Y en caso de que eso ocurra, ¿quién podría beneficiarse?

Al presidente le espera un 2008 con varios desafíos, como la implementación de la reforma de la salud, el ajuste del IRPF, la negociación colectiva de salarios y la anunciada reforma del Estado. Si todo sigue como va, este escenario no tiene por qué depararle a gobierno grandes contratiempos. En cambio, la hipótesis del reeleccionismo agregaría a la agenda presidencial un proyecto de reforma constitucional cuya campaña seguramente será durísima. Y esto por dos razones. La primera porque la oposición cuestiona la legalidad del proyecto reeleccionista. La campaña no se centraría en las virtudes o defectos de la reforma sino en la legitimidad del sistema propuesto, lo que seguramente generará división y encrespamiento en la sociedad.

La segunda, porque significaría un cambio en la palabra empeñada. El "renunciamiento" de Vázquez lo colocó fuera de la contienda electoral. Fue esa nueva ubicación lo que facilitó la presencia de importantes dirigentes blancos y colorados en la conmemoración del Día del Nunca Más y dirigió los dardos de la oposición contra los candidatos emergentes, especialmente Danilo Astori. ¿Qué diría para explicar semejante cambio de rumbo? ¿Que aquella declaración del 4 de junio fue "una jodita para Videomatch"?

Vázquez ya entró en la historia nacional como el primer presidente de izquierda y a menos que ocurra algún imprevisto, también tendrá un lugar destacado como el conductor del país en uno de sus momentos de mayor florecimiento. Faltar a su palabra y protagonizar una campaña reeleccionista cuestionada en su constitucionalidad por buena parte de la población comprometería innecesariamente su legado político.

Los dirigentes que sueñan con la reelección deberían dejar de perder el tiempo para pensar en un candidato que capitalice el gran momento que vive el país y la buena imagen del gobierno de Vázquez sin ser despedazado en las fauces del internismo frentista.