Contenido creado por Gastón Fernández Castro
Cybertario

Milagros

Milagros

22.06.2011

Lectura: 3'

2011-06-22T07:29:07-03:00
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Piscina 1. Hoy no es mi día. Me duele el nervio ciático y no se me ocurre de qué escribir. ¿Acuerdo sobre minoridad infractora o rebaja de la edad de imputabilidad? ¿Sistema educativo, o lo que sea que tenemos, en crisis o aumento de la partida para la ANEP? ¿Distribución o generación de la riqueza, tipo minería a cielo abierto y esas cosas? Debo nadar tres veces por semana para superar las secuelas de la cirugía. Vuelvo a zambullirme.

Piscina 4. En el carril de al lado se sumerge un grupo de adolescentes que vienen todos los lunes desde Colinas de Solymar, un lugar muy pobre al Norte de todo. Recuerdo cómo eran hace tan solo dos meses. No dejaban de gritar y golpearse. El más petizo (vandálico y simpático en idénticas proporciones) casi me emboca con el filo de la colchoneta flotadora. "Disculpe, pero… ¿Usted no es el de la tele? Sí, pibe, pero nadá y no jodas". No se lo dije. Sonreí, confiado en la profesora, que los controlaba con dulce severidad. ¿Por qué no prueba con más rigor, profe? Ahora los veo concentrados en sus ejercicios, jugando en el agua, divertidos y autosuficientes. De no creer.

Piscina 8. Apenas puedo respirar. ¿No fue a ese jovencito que está haciendo ejercicios con el profe al que le ofrecí mi desodorante? "Te lo presto si hinchás por Peñarol en el clásico". Serio y sin mirarme, me respondió que el trato era imposible porque él siempre había sido hincha de Nacional. Avergonzado, le presté el desodorante. A la semana siguiente se apareció con un frasco de perfume, que me ofreció con gentileza. "No gracias, le contesté, y te felicito por el resultado". ¿Cómo es posible que hayan cambiado tanto en tan poco tiempo? Estaba por responder la pregunta cuando recordé que no tenía tema para mi columna y que mi columna necesitaba que nadara más y reflexionara menos. Al agua.

Piscina 10. ¿Quién se llevó todo el aire? Digo, más allá de las bromas obvias. Mis vecinos de carril son cada vez más. Ahora vienen dos jovencitas a las que los varones tratan con respeto. Me tratan de "usted", a diferencia del resto de los nadadores, a los que llaman indiscriminadamente "amigo" o simplemente, "amistá". En dos meses, aprendieron algo más que el estilo crol. Quizás yo me esté reblandeciendo con los años y el cloro, pero los veo con otro semblante, acaso con menos crispación y más confianza en sí mismos. Ahora son Maikol y Yonatan, como siempre, pero saben nadar. No se lo sacaron a otro ni tuvieron que pegar ni defenderse más que de ellos mismos. Disciplina, juego, sacrificio y un adulto que instruye con respeto y compromiso están logrando el milagro. Son mejores y se dieron cuenta.

Piscina 12. "¿Usted es el de la tele?". "Me llamo Gerardo. Vos sos Maikol, ¿no?". "Sí".  "Bueno, Maikol, entonces mirá para adelante que el Yonatan te va a partir al medio de una brazada".

Piscina 14. ¿Minoridad infractora? ¿Crisis del sistema educativo? ¿Distribución de la riqueza? ¿Oxígeno? ¿Palpitaciones? Me duele el nervio ciático y no tengo tema. Es difícil escribir columnas de actualidad todas las semanas, y además, hoy no es mi día.