Contenido creado por Gastón Fernández Castro
Navegaciones

Los nudos de Montevideo

Los nudos de Montevideo

04.05.2010

Lectura: 5'

2010-05-04T10:18:05-03:00
Compartir en

Gobernar es elegir las prioridades, los tiempos y las fuerzas necesarias para resolverlas. El futuro gobierno de Montevideo tendrá – como siempre – muchos nudos que requerirán su atención. Yo me voy a referir al que considero principal.

Si no resuelve ese nudo, fracasará. Estrepitosamente. Una intendencia eficiente, con servicios adecuados, con una correcta relación con los vecinos, con planes y objetivos estratégicos en marcha y no sólo en el papel es incompatible, imposible con la actual relación con ADEOM. Y digo ADEOM y no los funcionarios municipales. Lo explicaré más adelante.

Tenemos casi 10 mil funcionarios municipales efectivos, o contratados o con diversas formas de dependencia con la IMM, ganan buenos sueldos, de los mejores de la administración pública, sin duda son por lejos de los mejores sueldos municipales, tienen equipamientos técnicos razonables, trabajan 6 horas diarias, tienen una carrera funcional racional, entran por concurso y unos cuantos beneficios más.

Todos los montevideanos deberíamos sentirnos orgullosos de que los que atienden nuestra ciudad y a nosotros, sus habitantes, tengan buenas condiciones laborales, pero sucede todo lo contrario. Estamos enojados, atragantados, desconformes y los miramos con extrema desconfianza.

Y conste y lo hago explícito que no utilizo los argumentos efectivos y reales de que somos nosotros los que le pagamos el sueldo. Decirlo es en realidad una manifestación más de impotencia y de entrega. Porque se lo seguiremos pagando. No tengan dudas.

Como en todos los sectores de cualquier actividad humana, hay malos, regulares, buenos, muy buenos, hay de todo, pero para la gran mayoría de los habitantes de Montevideo, sus funcionarios son considerados pésimos. Si tienen dudas consulten cualquier encuesta cuantitativa, o grupos motivacionales, hablen en la calle, en el bar, en todo Montevideo.

No queremos simplificar las cosas, las responsabilidades por lo que funciona bien o regular o mal en la IMM no son ni todas, ni las principales son de sus funcionarios o de su sindicato.

La primera responsabilidad como en todas las cosas de un gobierno, son siempre políticas. Por eso el nudo lo deberá afrontar el gobierno, la fuerza política que seguramente gobernará Montevideo: el Frente Amplio.

Lo reitero, no hay ninguna posibilidad de lograr un gobierno de primera, ni siquiera medianamente bueno con la actual relación con ADEOM.

Hay 6.200 funcionarios afiliados a ADEOM y en las elecciones de sus autoridades participan alrededor del 50%, pero, a la hora de las relaciones con las autoridades y mucho peor, con la gente, con los servicios municipales, todos somos rehenes de ADEOM. O cómplices.

ADEOM ha impuesto un estilo de relaciones, que incluyeron los insultos, la agresión y siempre la amenaza casi sin limites. Recordemos las manifestaciones contra los intendentes y las bajezas que les dijeron a algunos funcionarios y directivos de la IMM. Y no pasó nada, todos miramos hacia el costado.

En el próximo periodo habrá que definir si ADEOM puede manejar resortes fundamentales de la gestión, con las resoluciones de unos pocos cientos de funcionarios, defender a quien viola las normas más elementales de convivencia, quien utiliza la basura para tener a la ciudad de rehén, suspender una espectáculo internacional en el Solis. Como lo hizo ayer, lunes 3 de mayo, desinteresadamente y a una semana de las elecciones y por un reclamo que viene desde el año 1996...

Sin resolver ese nudo, no hay posibilidades de seguir adelante, de progresar. Hay muchas maneras de afrontarlo. Una es seguir haciéndonos los distraídos y considerar que son “compañeros” equivocados y seguir cinco años más por esta bajada, la otra es asumir que toda la fuerza política se debe comprometer en esta batalla, y darla en serio. Con firmeza, con inteligencia y afrontando las consecuencias. No es una batalla sólo para la futura intendenta, ni para su equipo, es de todo el FA en Montevideo. Voy a utilizar un adjetivo complejo: es una batalla histórica.

No es una batalla administrativa, es una profunda disputa política, cultural e ideológica. Con esa mentalidad no hay espacio para progresar, es un reducto del peor corporativismo. Claro que si premiamos a alguno de los que hace pocos meses asaltaron el despacho del intendente y los designamos en los más altos cargos municipales, es una batalla perdida de antemano. Y eso sucedió.

No es tampoco una batalla departamental, va mucho más allá, es el enfrentamiento y la derrota de ciertas mentalidades que existen y están equistadas en otros sectores de la vida nacional y que bloquean cualquier progreso y reforma en serio. Aunque se vistan con ropaje de izquierda y se cubran con lenguaje de izquierda.

¿Es de izquierda a una semana de las elecciones dejar la ciudad sin limpiar, sin recoger la basura? ¿Es de izquierda, o tiene un mínimo de progresismo defender a un inspector de arremete contra una ciudadana e invoca su pequeña y miserable porción de poder? ¿Es posible convivir con los que todos los días juegan con el tiempo de los ciudadanos para proteger su pequeña porción de poder, y además enchastran a los que quieren trabajar bien y con eficiencia.

Yo voy a votar a Ana Olivera porque es la candidata del Frente Amplio, porque conoce la IMM, porque es de izquierda y además porque creo que esta batalla, este nudo sólo lo puede desatar la izquierda, el Frente Amplio en su conjunto. Yo hoy voy a aportar mi granito incómodo de arena al debate, porque no siempre es mejor callarse, rumiar en los rincones, putear entre nosotros y padecer la situación como si fuera parte de la geología nacional.

Los que nos integraremos a la geología nacional seremos nosotros si no afrontamos este nudo, terminará por ahorcarnos.