Contenido creado por Gastón Fernández Castro
Cybertario

Fórmula mágica

Fórmula mágica

25.06.2008

Lectura: 3'

2008-06-25T09:10:15-03:00
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Las reiteradas referencias del presidente Vázquez a la posible fórmula presidencial del Frente Amplio generan cada vez menos resistencia. Aunque todavía se oyen voces que expresan el enfrentamiento de intereses de los diversos sectores, Astori y Mujica no tienen rivales que puedan siquiera acercárseles en popularidad. El problema es que, si no hay acuerdo antes del congreso de diciembre próximo, la candidatura presidencial se resolverá en las urnas, donde la chance del ministro de Economía de acceder a la candidatura presidencial se reduce mucho. La convicción de que la fórmula Astori-Mujica y no otra (ni siquiera la inversa) puede virtualmente asegurar a la izquierda una nueva victoria electoral, es un argumento de peso para favorecer un entendimiento.

¿Por qué la fórmula debe ser encabezada por Astori siendo que Mujica cuenta con mayor respaldo electoral? La respuesta sería más sencilla si la pregunta se refiriera a qué características debería tener una fórmula para ser exitosa en las elecciones y en el eventual ejercicio de gobierno. Aunque no se pueden omitir otras consideraciones importantes (como los equilibrios políticos e ideológicos, siempre delicados en la interna frentista) lo primero que debería asegurarse es la capacidad de persuadir a los electores sobre sus ventajas relativas, y lo segundo, la capacidad de conducir con éxito al país en las circunstancias por venir.

En su Retórica, Aristóteles dividía los medios de persuasión en tres: el ethos, que se sustenta en la credibilidad del sujeto, el pathos, que le permite persuadir a través de las emociones, y el logos, cuyo medio es el razonamiento. Parece evidente que Astori es un experto en el manejo del logos, Mujica lo aventaja considerablemente en el manejo del pathos, y ambos poseen un ethos más que aceptable, incluso fuera de su fuerza política.

Lo segundo es el arte de gobernar, que requiere algunas virtudes específicas: el futuro presidente tendrá como tarea esencial liderar al país en un tiempo de incertidumbre y plantear sus reclamos en los foros internacionales, y el vicepresidente deberá articular acuerdos en el Parlamento, donde el Frente Amplio difícilmente cuente con mayoría absoluta.

También en este aspecto una fórmula Astori-Mujica parece ideal, aunque con algunos matices: mientras resulta difícil imaginar a Astori en un segundo puesto y matizando sus puntos de vista con los de la oposición, Mujica puede ser percibido como un líder nacional, al menos dentro de fronteras. Sólo que de plantearse en esos términos (Mujica-Astori) la fórmula despertaría rechazos que no estarían presentes en la misma dimensión en la expresión inversa.

La fórmula que impulsa Vázquez es de una lógica implacable, como parecen ir comprendiendo los diversos actores de la interna frentista. Si bien no le asegura la victoria al Frente Amplio, es la mejor con la que puedan contar en las próximas elecciones y quizás, la que más teman sus oponentes.