Contenido creado por Gastón Fernández Castro
Navegaciones

El equilibrio del terror

El equilibrio del terror

10.11.2009

Lectura: 8'

2009-11-10T10:42:58-03:00
Compartir en

Las campañas electorales son un resumen de todo. Lo bueno, lo malo, lo grande y lo deleznable, ponen en evidencia los subterráneos y las altas torres de la política. Y pensar que los candidatos llevan ese nombre porque en la antigua Roma los que se postulaban al cargo de cónsules recorrían el Foro vestidos con una túnica blanca, es decir “cándida” y de allí el nombre: candidato. Algunos tendrían que teñir su túnica de apuro o al menos incorporarle algunas manchas oscuras, muy oscuras.

Este fin de semana fue la culminación del manchado de la compaña de la peor manera. El Partido Nacional tuvo que reconocer - luego de ser pillado con las manos en la masa hasta el codo - que había producido, distribuido y pagado una campaña sin firma, subrayo sin firma, que simulaba ser un informativo de televisión y radio y que utilizando noticias manipuladas acusaba a José Mujica de cosas muy graves.

La campaña se distribuyó el viernes de tarde, a través de una agencia de medios A&B y las piezas eran todas absolutamente todas sin firma y se ubicaban especialmente en las tandas de los informativos de los canales de televisión y emisoras del interior. Ya se ha hecho en otras campañas, pero con firma. Los viernes es un día ideal porque de esa manera durante todo el fin de semana se bloquea la posibilidad para el Frente Amplio de realizar las acciones legales correspondientes.

El haber pautado las piezas en el interior es un doble agravio. En primer lugar a los ciudadanos de los departamentos porque se los subestima y se considera que pueden tragarse ese tipo de basura con más facilidad y segundo para que la alerta llegara lo más tarde posible. Tienen y mantiene la vieja visión atrasada y cerril del interior del país. Así les va, de sorpresa en sorpresa y de derrota en derrota.

El tener que tragar tanta basura está demostrando que debilita las neuronas, es así que un senador considerado hasta ahora inteligente y capaz, como Gustavo Penadés tuvo que salir a dar explicaciones lastimosas y balbuceantes. Lo único que atinó a decir es que la elección delos canales del interior era por razones económicas. No se lo cree ni Pinocho. Si hay algo que la campaña de Lacalle no tiene son problemas económicos.

La gran “trovata” publicitaria de los nuevos responsables de la campaña de Lacalle es palabra “equilibrio”. La pieza clave de esta embestida baguala fue una vez más un dirigente colorado, el ex presidente Batlle.

Que casualidad. Pocos días antes de toda esta movida se conoció en la prensa que junto con Batlle su responsable de la campaña electoral en el año 1999 se sumaba al apoyo a Lacalle. Preguntita ¿ en el manotón de ahogados que lanza la fórmula blanca, cuanto tiene que ver la experiencia de ese publicista? Ya el contubernio sería total y absoluto.

Emitir piezas sin firma y con esas carácteristicas, es una demostración de cobardía política. Y en este país si hay algo que los uruguayos no soportamos es la cobardía. Si uno dice cosas pesadas, agravios y acusaciones tiene que poner la firma y la cara y no tratar de engañar a la gente y echarle la culpa a supuestos periodistas. Es además un insulto a los verdaderos periodistas. Y van....

Es además un insulto a la verdad. Porque la información es manipulada, es deformada, es presentada en los textos y las imágenes como lo que es, una campaña sucia y despreciable. Y además se simula el cabezal de un diario inexistente y un informativo de televisión o de radio. De la peor especie.

Pero ahora dediquemos algunos renglones a formular algunas preguntas. Se descubre un arsenal de armas en poder del contador Saul Feldman. Los episodios son conocidos. A mi a esta altura me sepulta un alud de preguntas, para seguir el método utilizado por la dupla Batlle, Lacalle para distribuirlo a todos los medios del interior en formato trucho.

Son preguntas que esperemos que en el ámbito judicial, policial y administrativo tengan rápida respuesta. Otras son preguntas a los viejos y oxidados dirigentes colorados y blancos.

¿Cuántos años hace que estaba allí ese verdadero supermercado de armas y cuando se iniciaron los robos en unidades militares? ¿El incendio fue una casualidad pre electoral? ¿Cómo es posible que en tan poco tiempo se descubriera el arsenal, saliera presto a declarar el Dr. Batlle, lo levantara la prensa, se produjeran piezas publicitarias sobre sus declaraciones y además se distribuyeran tan oportunamente a los medios del interior? ¿Cómo lograron saber en tan pocas horas que Feldamn fue en el año 1965 de MUSP, cuando eso no aparece ni en los registro de inteligencia ni en Google? ¡Qué velocidad, qué sincronización!

El contador Felman demostró algunas cosas indiscutibles: no trabajaba sólo; estaba entrenado en las mejores técnicas de resistencia de uso de todo tipo de armas, no creo que lo haya aprendido en su facultad, ni por correspondencia, ni en el año 1965 ¿A qué países viajó Felman y en cuál de ellos existe este tipo de formación militar y operativa?

El Dr. Jorge Batlle alto funcionario público jubilado al que le pagamos todos los uruguayos una cifra muy importante a pesar de los desastres que nos legó, ¿no tiene la obligación de presentarse ante la justicia y/o la policía a denunciar las supuestas vinculaciones de Marenales y Mujica con el arsenal? Porque cuando fue al juzgado convocado por sus declaraciones, no sólo no aportó nada, sino que simplemente dijo que las suyas eran declaraciones “políticas” y que no tenía ninguna prueba. Una chantada más.

Discrepo, a Batlle no hay que hacerle una pericia psiquiátrica, sino moral. Lo hizo con plena conciencia, con los agravantes de sus altos cargos, en primer lugar el de ex Presidente de la República. Le hace mal al país, a su imagen internacional. Pero para Batlle eso es totalmente superfluo. Que manera miserable de irse de la política, ya no por la ventana luego de haber destruido al país y a su partido, sino por donde sacan el cubo de la basura. Y lo digo con dolor porque a pesar de las muchas diferencias, le tenía el respeto que se merece un político de toda una vida y alguien que en algún momento fue un liberal.

Sus gestos actuales no tienen nada que ver con un liberal auténtico y respetable. Que siga, es el más grande proveedor de votos de la izquierda uruguaya. Adelante con la fórmula Lacalle-Batlle.

Hay otras preguntas: Saul Felman cuando fue director principal de una empresa forestal de triste recuerdo y que dejó el tendal de víctimas ¿con quién se relacionó, cuáles eran sus socios y a que partido político pertenecían la mayoría de sus socios? ¿Alguna institución estatal o para estatal invirtió en Palo Alto? ¿Cuál? ¿Quién la dirigía? ¿Cuánto perdió? Esas pistas son de hierro porque para hacer sociedades de ese tipo hace falta mucha confianza y complicidad...¿El Dr. Jorge Batlle no conoce a ninguno de esos personajes?

¿En todo esto no habrá una mezcla de aprovechar información vieja y conocida por parte resabios de viejos servicios, o de bandas de delincuentes, o de contrabandistas y de lavarse olímpicamente la manos desviando la atención de viejos vínculos y complicidades? Y si hablamos de contrabando en el Uruguay, todos sabemos hacia dónde mirar.

Que el Partido Nacional que durante su gobierno le pasaron por debajo de las narices nada menos que el apresamiento, secuestro, asesinato de Eugenio Berrios por parte de agentes de Pinochet y con diversas formas de intervención de la policía de oficiales del ejercito se den el lujo de interpelar a ministros en pleno proceso de investigación del descubrimiento del arsenal de Felman, es de Ripley. Si no nos hiciera tanto daño a la imagen exterior del país, sería sólo cuestión de tener paciencia y burlarnos después.

En este gobierno, las cosas se descubren se ponen a la luz del día, se investiga y cae el que tenga que caer si tiene responsabilidades. Esperemos que en este caso la justicia sin apuro y sin pausa lo haga a la brevedad.

La formula progresista respondió como corresponde, con seriedad, sin doblar la apuesta en la basura, aumentando sus propuestas, sus ideas, sus discurso sereno y firme de seguir cambiando, entre otras cosas para que estas bajezas políticas no vuelvan a repetirse. Lo que nunca hay que poner en juego, es la propia identidad.

Lo que está claro como el agua y no hay que hacerse ninguna pregunta es que la desesperación de algunos por el poder no tiene límites, mienten, deforman, se ocultan, ensucian al país ante el mundo, queman los puentes de cualquier debate y negociación, gane quien gane. Y a eso lo llaman equilibrio. Si, es el equilibrio del terror. ¿Hasta dónde están dispuestos a llegar?