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Breogán Gonda

Escribe Breogán Gonda

Después de la 14.ª fecha de la Eliminatoria Sudamericana

La sanción a Messi

30.03.2017 14:57

Lectura: 5'

2017-03-30T14:57:00-03:00
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El hecho más sorprendente y, quizás más importante pero, en cualquier caso, el más desagradable de esta fecha fue la sanción a Messi. Se le ha suspendido por cuatro partidos de la Eliminatoria, comenzando ayer, por haber insultado a un auxiliar del árbitro, sin perjuicio de que ni el árbitro ni ninguno de sus auxiliares sintió el tal insulto y, desde luego, no lo consignaron en el formulario oficial.

No voy a entrar en el detalle de si insultó o no insultó y, si lo hizo, qué dijo. ¡Me parece vergonzoso que anden leyendo lo labios en un video para saber que dijo una persona!

Me preocupan cosas más importantes: desde el principio de los tiempos, la autoridad máxima en un partido de fútbol fue el árbitro, que impartía justicia de manera instantánea, en cada momento, ante las incidencias del juego, infracciones, incorrecciones, etc. Siempre en forma inapelable y definitiva.

Por ejemplo, las incidencias deben ser apreciadas por el árbitro y sus auxiliares y fallar en consecuencia en el momento: si la pelota entró al arco, pero el árbitro entiende que no o si, por error,  concede un penal que no fue...   cuando se reanuda el juego no hay manera de volver atrás en nada, lo que ocurrió es asunto laudado y terminado.

En buena parte esto es muy importante para la enorme popularidad del fútbol en todo el mundo. Últimamente se ha ensayado utilizar tecnología para ayudar al árbitro a decidir cuando tenga dudas: me parece muy bueno, porque se evitarán errores siempre que: a) que la información que el árbitro necesite para despejar las dudas esté disponible de inmediato; y b) que el árbitro y sólo el árbitro sea el que falle en definitiva y el único responsable de sus fallos.

En los últimos años, lamentablemente, aparecieron los "fallos de oficio" dictados por una suerte de comisión de la FIFA, una especie de "Gran Hermano" que, desde su Olimpo estudia y falla con  independencia de la decisión que haya tomado el árbitro en el momento (de momento sobre asuntos disciplinarios pero...   si seguimos así...  ¿quién sabe en el futuro?).

En el Uruguay hemos sufrido esto, por ejemplo, con Suárez en el Campeonato del Mundo  de 2014, cuando ni el árbitro, ni sus auxiliares, ni las 20 cámaras que filmaban todo (todos los elementos oficiales y objetivos que existían) percibieron una "mordida" de Suárez a Chelini pero, sin embargo apareció una grabación de un canal privado (¿real, original o trucada?...  ¡nadie sabe!) y, con esos elementos se condenó a Suárez a a) deportación inmediata del Brasil; b) prohibición absoluta de jugar al fútbol o de concurrir a partidos de fútbol, en todo el mundo,  durante cuatro meses; c) suspensión por 9 partidos oficiales (de hecho dos años) para defender a su Selección.

Increíblemente, cuando se supo la integración del tal tribunal, se pudo ver que estaba integrado básicamente por delegados de países donde el fútbol no es importante o que, por lo menos, para el fútbol son irrelevantes.

Todo esto desprestigia a la FIFA y al fútbol todo. Nos dolió y lo reprobamos cuando afectó a Suárez y a Uruguay y, de la misma manera, debemos reprobarlo ahora cuando afecta a Messi (que además es un jugador correcto que es perseguido por los golpes de todas las defensas) y a Argentina.  

Todos esperamos que las nuevas autoridades de la FIFA desmonten totalmente la organización de Blatter, de manera que no tengamos más estas sorpresas desagradables.     

Se jugó la 14ª fecha de la Eliminatoria con los siguientes resultados:

Bolivia 2, Argentina 0, en La Paz. Argentina, que según mostró la semana pasada contra Chile no anda bien y en parte por al altura de La Paz y quizás también en parte por el choque emocional que deparó la sorpresiva suspensión de Messi, jugó muy mal y perdió bien.

Ecuador 0, Colombia 2, en Quito. Mayúscula sorpresa. Era el gran partido de la fecha, entre rivales directos para uno de los últimos cupos de la clasificación. Ecuador siempre es favorito en la altura de Quito, pero Colombia le ganó con amplitud y con facilidad.

 

 

Chile 3, Venezuela 1, en Santiago. Chile salió con todo y parecía que llegaría a una goleada histórica. De a poco fue perdiendo impulso, un error arbitral no concedió un segundo gol de Venezuela y, finalmente, su golero atajó un penal.

Brasil 3, Paraguay 0, en São Paulo. Brasil, a media maquina, ganó bien.

Perú 2, Uruguay 1, en Lima.

Esta vez, Perú jugó mejor y ganó bien.

Uruguay luchó hasta el último minuto, pero nunca encontró un funcionamiento fluído y, nuevamente, falló en coberturas defensivas cruciales. Se puso 1 a 0, pero no lo pudo mantener.

Debemos mantener o, incluso, aumentar el apoyo al plantel seleccionado y al Maestro Tabárez en este momento de turbulencias. Cualquier otra posición sería injusta y suicida.

El tema deportivo va mucho más allá de este partido y prefiero tratarlo con calma en un artículo especial.

Las posiciones actuales, cuando faltan 12 puntos por jugar son:

1º Brasil, 33 puntos (clasificado)
2º Colombia, 24 puntos, diferencia de goles: + 3.  
3º Uruguay, 23 puntos, diferencia de goles: + 9.
4º Chile, 23 puntos, diferencia de goles: + 5.
5º Argentina, 22 puntos, diferencia de goles: + 1.  
6º Ecuador, 20 puntos, diferencia de goles: + 3.
7º Perú, 18 puntos, diferencia de goles: - 1.
8º Paraguay, 18 puntos, diferencia de goles: - 8.
9º Bolivia, 10 puntos, (eliminado).
10º Venezuela, 6 puntos, (eliminado).