“Yo entiendo que no me quieran dar monedas, pero hay gente que ni siquiera te mira”

Por Juan Andrés "el Gordo" Verde

Te propongo "hacer la del Faraón Godín". No lo conozco personalmente, pero demuestra ser un tipo muy cercano y por sobre todo: no indiferente a los demás. Me siento orgulloso de que alguien así, lleve la cinta de capitán representando a la Celeste.

Hace un tiempo me tocó almorzar con dos amigos que cuidan coches en la esquina de casa, Luis y Nacho. Ambos muy macanudos y comprometidos. En un momento, Luis se puso un poco melancólico y me dijo: "Sabe Padre... a veces la gente piensa que uno es de piedra. Yo entiendo que no me quieran dar monedas... hasta capaz ya los tenemos cansados (porque sé que no todos en la cuadra trabajamos con el mismo respeto). Pero hay gente que ni siquiera me mira, ¿sabe? Hacen como que no estás. Eso es lo que más duele... por lo menos si bajan la ventanilla y te dicen GRACIAS, yo me quedo contento porque me doy cuenta que hice las cosas bien..." (palabras textuales). Simplemente lo quería compartir con cada uno de ustedes. Como dijo Luis: ciertamente no todos son igual de respetuosos. Pero "allá ellos". Hoy les propongo hacer la de Godín.

Recuerdo muy bien en el partido frente a Rusia, tuvo un gesto muy evidente (pero lo suele hacer siempre). En el momento del sorteo, saludó a los jueces, al capitán ruso y le chocó los 5 al niño ruso que oficiaba de "separador" entre los cuadros. Cuando llegó el momento del capitán ruso (no por mala persona, pero quizás por distraído) "dejó pagando" al niño de su país. No lo saludó y se notó en el rostro del niño el gesto de desilusión. Ese que sentimos todos cuando por un momento nos sabemos "indiferentes" para el otro.

El desafío: andar por la vida, buscando ver más allá de nosotros mismos. Y te diría con un plus: el de estar atentos (en la medida de nuestras posibilidades) a las personas que, en cada día, se nos presentan por diversas circunstancias. Quizás con muy poco, podemos cambiarle el día y hasta quizás la vida a quien menos imaginamos.

El Faraón, vos y yo... vamos a tener mil oportunidades para poner en práctica "la calidez humana". En una cancha, en la calle, en el trabajo, en tu familia... ¡Ojalá las sepamos aprovechar! Porque estos detalles, hacen de nosotros, mejores personas.

¡Buena Semana! ¡Un fuerte abrazo!