Contenido creado por Gerardo Carrasco
Tecnología

Que arranque

Nasa aprueba nuevo diseño de motor que podría revolucionar viajes espaciales

El motor de cohete de detonación rotatoria (RDRE, por sus siglas en inglés) pasó su prueba de —literalmente—fuego.

30.01.2023 11:59

Lectura: 3'

2023-01-30T11:59:00-03:00
Compartir en

La NASA validó el diseño de un motor de cohete de próxima generación que podría impulsar la próxima fase de exploración del espacio profundo de la humanidad. El año pasado, en el Marshall Space Flight Center de la NASA, los ingenieros realizaron una prueba de fuego en caliente del primer motor de cohete de detonación rotatoria (RDRE) a gran escala. Esta tecnología podría proporcionar un alto empuje con una eficiencia mucho mayor en comparación con los motores de cohetes actuales.

El prototipo RDRE no se montó en un cohete, sino que se adjuntó a un banco de pruebas estacionario para medir con precisión sus características de rendimiento, según informa la web especializada ExtremeTech. El equipo encendió el motor más de una docena de veces, totalizando casi 10 minutos de empuje activo. Los motores de detonación rotatoria se llaman así porque producen empuje a través de un fenómeno de combustión supersónica conocido como detonación. Las ondas de detonación viajan alrededor de una cámara circular, extrayendo más potencia del combustible, pero someten al motor a una tensión increíble.

La NASA cree que la propulsión RDRE podría ser la tecnología ideal para llevar misiones tripuladas y no tripuladas a destinos distantes como Marte, y podría convertirse en una parte integral del plan de la NASA para una presencia humana a largo plazo en la Luna. Eso depende del éxito del Programa Artemis, que se puso en marcha recientemente con el lanzamiento del primer cohete del Sistema de Lanzamiento Espacial (SLS) de la agencia. Ese gigante es actualmente el cohete más poderoso del mundo, pero RDRE podría hacer que sus viejos motores RS-25 Space Shuttle parezcan aún más anticuados.

El prototipo RDRE se construyó con tecnología de impresión 3D, por lo que la NASA estaba interesada en ver cómo se mantenía bajo fuego sostenido. Confirmar que el motor era estable y capaz de proporcionar un empuje constante era el objetivo principal de la prueba, y la pasó con gran éxito. El RDRE produjo más de 4000 libras de empuje durante períodos de hasta un minuto, con una presión de cámara promedio de 622 libras por pulgada cuadrada. Eso es un récord para los diseños RDRE. Esto se debe en parte al uso de una aleación de cobre desarrollada por la NASA conocida como GRCop-42, que permite que el motor funcione en condiciones extremas durante períodos prolongados sin sobrecalentarse.

La NASA y su socio comercial, IN Space LLC, ahora están planeando la construcción de un prototipo más grande que impulsará el empuje a 10,000 libras. Eso está entrando en el rango de motores de cohetes de tamaño mediano, pero muy por debajo del RS-25 (más de 400,000 LBF) o SpaceX Merlin (alrededor de 200,000 LBF), ambos medidos al nivel del mar. La NASA espera que el RDRE más grande lo ayude a comprender mejor cómo esta tecnología puede superar de manera segura a los motores de cohetes líquidos tradicionales.