Microsoft planea abrir una “fábrica de agentes” de IA: ¿qué significa y cómo funciona?

Microsoft se encuentra inmerso en una transformación radical: crear una plataforma que permita a cualquier organización construir su propia “fábrica de agentes” de inteligencia artificial, capaz de automatizar tareas y rediseñar por completo cómo se desarrolla software.

La visión fue detallada por Jay Parikh, jefe del equipo CoreAI de Microsoft, en entrevista con el periodista Tom Warren para The Verge. Según explicó, la empresa quiere que su plataforma sirva para que clientes de todo tipo “construyan su propia fábrica de agentes”, integrando herramientas como GitHub Copilot, Azure y los nuevos modelos del AI Foundry en un ecosistema coherente.

Parikh, exdirector de Ingeniería en Meta, fue reclutado directamente por el CEO Satya Nadella, quien lo invitó a liderar la transformación de Microsoft en pleno auge de la inteligencia artificial. Al describir su idea a Bill Gates, Parikh descubrió que no era del todo nueva: “Bill pensaba en Microsoft como una fábrica de software. Esto es igual, pero para agentes de IA”.

El concepto de “fábrica” no se trata de una planta industrial, sino de una infraestructura tecnológica que permita crear, entrenar y desplegar agentes inteligentes de forma ágil y escalable. A diferencia de los chatbots del pasado, estos agentes están diseñados para tomar decisiones, actuar sobre entornos digitales y automatizar procesos de negocio complejos.

“Durante los últimos años, vimos muchos chatbots sin retorno real. Era gente probando la tecnología”, dijo Parikh. “Pero los modelos de hoy son muchísimo más avanzados que hace un año. La IA ya no es un accesorio: es el punto de partida”.

Microsoft quiere que los desarrolladores dejen de “pegar” un poco de IA a software ya hecho, y en cambio comiencen por el modelo. La plataforma ofrecería el andamiaje necesario para partir desde un modelo de lenguaje, sumar datos, reglas y funcionalidades, y construir agentes inteligentes adaptados a cada empresa.

La competencia, sin embargo, es feroz. Google, Anthropic, OpenAI (aliada de Microsoft) y otras firmas también corren hacia el mismo objetivo: dominar la era de los agentes inteligentes. Incluso Sam Altman, CEO de OpenAI, afirmó que su empresa busca convertirse en la “suscripción central de IA” para usuarios y empresas.

Microsoft, por su parte, apuesta a avanzar más rápido que nadie. “Si aprendemos más rápido que los demás, vamos a entregar productos sólidos y útiles”, sostuvo Parikh. Para ello, está reformando los equipos de desarrollo internos y enviando correos semanales —incluso los sábados—, a sus ingenieros para acelerar la adopción de IA.

Pero el contexto no es solo técnico. Durante el evento Build 2025, donde Parikh expuso estas ideas, protestas por los contratos de Microsoft con el gobierno de Israel interrumpieron múltiples conferencias, incluyendo la suya. La empresa, que recientemente admitió esos acuerdos, negó que sus herramientas hayan sido utilizadas para causar daño, pero bloqueó temporalmente correos internos que incluyeran palabras como “Palestina” o “genocidio”.

También generó malestar la aparición virtual de Elon Musk, invitado por Nadella para anunciar la integración de modelos Grok 3 de xAI a Azure, y la reciente ola de más de 6.000 despidos dentro de la compañía, que afectaron la moral de sus equipos.

A pesar del ruido, Microsoft sigue desplegando funciones con IA en todos sus productos. Desde agentes que arreglan bugs en GitHub, hasta acciones inteligentes en el Explorador de Windows, pasando por la nueva API en Edge que permitirá correr modelos directamente desde el navegador.

El plan es ambicioso y disruptivo: convertir a Microsoft no solo en una empresa que usa inteligencia artificial, sino en la que permita a otros fabricarla por sí mismos. “No es un camino para los débiles de corazón”, advirtió Parikh. Pero es el camino que ya eligieron.