Maestro iraní inventa robot para enseñar a rezar

Un profesor iraní dio con una forma innovadora de estimular a los niños a cumplir con sus oraciones diarias, mediante el diseño de un robot que emplea como asistente de la práctica religiosa de sus alumnos en el aula.

Ahora, Akbar Rezaie enseña el Corán a los niños y niñas en la escuela primaria de Alborz, en la ciudad de Varamin, con la ayuda de su robot humanoide Veldan.

El robot se ha introducido en las clases para ofrecer un ejemplo visual de la oración. El aparato es atractivo y novedoso y tiene más probabilidades que el docente de captar la atención de los niños.

En declaraciones a la agencia Associated Press, Rezaie dijo que se inspiró en una muñeca de juguete que cantaba y bailaba.

"Una vez estaba en una reunión familiar donde había una niña jugando con una muñeca que podía bailar y cantar. Note que la pequeña miraba a la muñeca con gran atención, y me hizo pensar en construir un dispositivo que pudiera servir para fines religiosos y también para diversión", contó.

El docente asistió a clases privadas de robótica para aprender a diseñar y construir robots humanoides. Con tales conocimientos, se las ingenió para que el robot realizara los movimientos habituales de la actividad religiosa, incluida la prosternación, luego de hacer algunos ajustes al primer modelo.

Rezaie construyó el robot en su casa con herramientas comunes, y lo llamó "Veldan", que significa "Juventud de los Cielos".

En cuanto a la "materia prima", la obtuvo utilizando un kit educativo del fabricante coreano de robots Robotis Bioloid.

El maestro define su robot como una ayuda educativa a los docentes, y afirma que hasta ahora ha sido un éxito atrayendo a los chicos, por lo que recomienda su producción en masa.

"Puedes verlo en la reacción de los niños, en sus caras , te das cuenta de lo interesante que es para ellos ver cómo la ciencia de la robótica es muy bien utilizada para un propósito religioso, y estoy seguro de que será muy eficaz para enseñarles a orar", explica.

Para evitarse sorpresas, el docente patentó su creatura en la Organización de Estado de Irán para el Registro de Escrituras y Propiedades, organismo encargado de registrar inventos y proteger la propiedad intelectual de sus creadores.