Contenido creado por Martín Otheguy
Ciencia

Separando la paja del trigo

Lo que se debe saber sobre el coronavirus, desde su inicio hasta sus posibles curas

El químico Bernardo Borkenztain analiza lo que sabemos del SARS-COV2 y los resultados que han tenido las pruebas de laboratorio.

26.03.2020 13:54

Lectura: 9'

2020-03-26T13:54:00-03:00
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Por Q.F. Bernardo Borkenztain

borky@montevideo.com.uy

El virus

Los coronavirus son un tipo de virus respiratorio (1), que generan enfermedades que en algunos casos llega a la neumonía y la muerte del paciente, pero en un porcentaje bajo.

La peculiaridad de esta familia es que el material genético que tiene es de tipo ARN, menos complejo que el ADN ya que no hay un elemento que "corrige" los errores de multiplicación (llamado ADN POLIMERASA) y por eso mutan muy rápido y pueden tener variaciones muy grandes entre una y otra cepa. Esto les permite también poder atravesar lo que se llama "barrera entre las especies" y pasar de los murciélagos (como este caso) a los humanos con más facilidad que otros patógenos.

Lo anterior le permitió una característica que le da la alta tasa de contagio (que ocurre prácticamente desde que el individuo se infecta, a diferencia del anterior SARS) y no su peligrosidad intrínseca, que salvo en casos minoritarios no es tan alta (pero no es irrelevante).

En Uruguay tenemos un caso muy claro de como funciona esto. Una empresaria de ropa, como tantas, fue a Italia a buscar lo que mata esta temporada, y se los trajo. Como se siente superior a los seres humanos comunes, fue a un casamiento de 500 personas (pese a las advertencias para los viajeros) y contagió a 29 convirtiéndose en el "Paciente cero" (2), lo que se llama un "cluster" o racimo de personas que se convierten en focos de infección a su vez. Por esta razón los infectados, pese a muy buenas medidas de distanciamiento pasaron de uno a más de 200 en cerca de dos semanas, pero sin indicios de fase exponencial. Veremos esto en la próxima semana.

La enfermedad

Un error que se está cometiendo es el confundir el nombre del virus (SARS-COV2) con el de la enfermedad que produce (COVID-19). No es que sea grave, pero conviene ser precisos y sirve para calibrar lo que sabe la persona que habla.

Se ha dicho mucho con respecto a este tema, y la cercanía de la emergencia del primer brote no permite saber las consecuencias a largo plazo, pero hay algunas cosas que sabemos.

Primero que los países más afectados son China (3), Italia y España, lo que puede deberse a la forma de encarar las medidas, pero la realidad es que no se sabe a ciencia cierta.

Es sabido que la primera reacción china fue intentar ocultar el tema y eso permitió llegar a la fase de multiplicación exponencial de casos, momento en que empezó a actuar seriamente, pero ya era tarde.

Veamos cómo funciona esto. El virus se contagia principalmente por contacto con las secreciones de la persona infectada, por lo que la medida más obvia y eficaz para frenar su distribución, es, fue y será, hasta que haya una vacuna, el distanciamiento de las personas para evitarlo, junto con medidas de higiene sobre las que ya hemos abundado.

Se ha identificado un grupo de riesgo que son las personas mayores de 65 años junto con los inmunodeprimidos y los afectados de ciertas patologías como diabetes, hipertensión EPOC y otras. Esas personas deben ser cuidadosamente protegidas (4).

En cuanto a los síntomas, se han difundido ampliamente, desde los de una gripe fuerte asociada a dolores musculares, tos seca, fiebre, etc. hasta una neumonía que requiere internación. Existen evidencias de posibles secuelas pulmonares, pero esto se verá en el seguimiento de los pacientes que se curen, no es prudente alarmarse ahora, solamente cuidarse.

El diagnóstico

Lo más eficaz que puede hacer el Estado aparte de separar a los individuos es realizar múltiples pruebas para poder identificar a los infectados y ponerlos en cuarentena estricta, esa es la medida más lógica, y por la razón del artillero, en Uruguay se han hecho pocos, y sobre personas sospechosas, lo que sesga los resultados dando un porcentaje más alto que en la población total.

Sin llegar a la situación de China que utiliza su tecnología temible para usar las cámaras de reconocimiento facial para determinar qué persona tiene hipertermia (posible fiebre y por lo tanto candidato a infectado) disponer de un método rápido es necesario, y el test que se hace en Uruguay (PCR y otros métodos de laboratorio muy complicados de explicar) (5)  lleva horas y mucho trabajo del laboratorista tener los resultados. En cambio, los kits se resuelven en 10-15 minutos y se hacen sobre una muestra de sangre porque no miden el virus sino los anticuerpos y pueden hacerse en mayor cantidad, proporcionando información que es muy valiosa para determinar el movimiento de los contagios y georreferenciarlo.

¿Y la cura?

Lo primero es saber que no hay una cura antiviral disponible, no se debe bajo ninguna circunstancia automedicarse ni acopiar medicamentos de ningún tipo. Con tener los antialérgicos, analgésicos tipo acetaminofeno y lo que precise la persona de forma habitual alcanza. NO HAY CURAS DOMICILIARIAS.

Lo segundo es que se han reportado posibles curas como el REMDESIVIR  (6), que es un antiviral que se empezó a testear en febrero contra el SARS-COV2 pero sin resultados aún. Inicialmente fue presentado como un "medicamento huérfano", o sea uno para enfermedades extremadamente raras, lo que le daba privilegios extraordinarios de comercialización a la compañía que lo produce, pero la cual renunció a esos privilegios.

Por otro lado, se han reportado muy buenos resultados con una asociación de HIDROXICLOROQUINA (un antimalárico) con AZITROMICINA (un antibiótico) pero en pacientes con ciertas condiciones cardíacas puede producir muerte súbita, por lo que NO HAY QUE COMPRALOS PARA TENERLOS EN CASA en especial porque no sirven como profilaxis (prevenir el contagio) y deben ser administrados en pacientes graves solamente con la asistencia de un cardiólogo o intensivista al médico tratante. Son buenas noticias pero por favor no replicarlas porque si la gente empezara a comprar estos remedios no les servirían para nada y podrían complicar una herramienta útil. Si quieren prevenir, no se expongan.

Para terminar, el inefable Nicolás Maduro publicó en Twitter unos mensajes que fueron borrados por la red por fraudulentos en los que promocionaba un "medicamento" a base de "malhojillo, saúco, jengibre, pimienta negra, limones y miel" que había que tomarlo 7 veces al día por 12 semanas. Lo atribuía a un ignoto super científico venezolano, que no pudo ser entrevistado por nadie.

Más allá de que 12 semanas supera con mucho el transcurso del COVID-19 y en ese plazo todos los pacientes están curados o muertos, es el ejemplo del mal que pueden hacer las estupideces replicadas, especialmente cuando el que replica es una persona de alto perfil como Maduro, pero siempre es peligroso.

Haga caso: borre ese audio de Whatsapp, ese meme o ese texto. Paga triple contra sencillo que no sirve para nada y solo hace que el que lo recibe se enoje con Ud. Limítese a fuentes serias y ahí sí que evita uno de los dos males que nos aquejan.

De momento no tenemos vacuna ni remedio para prevenir el ataque del SARS-COV2, pero seguramente la primera el año que viene la tendremos, ahora, como se le atribuye a Einstein, a estupidez humana es infinita y nos va a seguir aquejando. Tratemos de matar esa plaga también.

Q.F. Bernardo Borkenztain

(1) Un virus es una entidad que no está completamente viva, tiene propiedades como que cristaliza que no es de un ser vivo y contiene la información para reproducirse (ADN O ARN) lo que sí es, pero para hacerlo necesita de la maquinaria replicadora de un huésped. Para hacerlo se inserta en el material nucleico del huésped. Si no lo enferma pasa a ser un "free rider" y se reproduce indefinidamente hasta que pasa a otra etapa, pero si lo hace tiene que generar múltiples copias y repartirlas de sí mismo antes de la posible muerte del anfitrión. (Simplificando)

(2) Hubiera entrado el virus de todas formas, y seguro hubo otros no detectados, pero la empresaria en cuestión es el personaje que todos amamos odiar, especialmente porque una vez puesta en cuarentena siguió exponiendo a sus vecinos y a los socios del Hospital Británico.

(3) No me sumo a la hipótesis, pero hay científicos que sostienen que la verdadera epidemia es la explosión de atención mediática y el intento de mucha gente (políticos y mercaderes) de obtener rédito. Particularmente la posibilidad no me suena a absurda, y el efecto de viralización (qué término en este caso) mediática sí contribuye al pánico y a sobre-reaccionar ante el tema. Y también está Bolsonaro, el estúpido incalificable de la crisis.

(4)  Esto no implica que las otras sean inmunes, nada más lejos de la verdad, es un tema estadístico. De hecho, en un video que se publicó pero era de uso interno el médico José Luis Callejas de un hospital de Granada sostiene que los italianos y españoles (latinos) tienen genes que predispondrían a la gravedad de la infección, así que sus descendientes convendría que se curaran en salud y tomaran sus precauciones con mucha seriedad.
Él propone un estudio que es para otra cosa y dos mecanismos posibles de diagnóstico, pero se los dejaremos a los médicos

(5) Reacción de cadena de la polimerasa por su sigla en inglés, básicamente multiplica el ADN o ARN en una muestra para hacerlo más analizable. Se usa mucho en medicina forense.

(6) De la compañía GILEAD, un nombre que no suena bien en el Río de la Plata y peor para quienes leímos o vimos la serie El cuento de la criada.

Por Q.F. Bernardo Borkenztain

borky@montevideo.com.uy