La misión Jupiter Icy Moons Explorer (JUICE) de la Agencia Espacial Europea (ESA, por sus siglas en inglés) dio un nuevo paso clave en su travesía al sistema exterior. Lanzada en abril de 2023, la sonda realizó un sobrevuelo exitoso a Venus, maniobra que le permitió aprovechar la atracción del planeta para aumentar su velocidad sin gastar combustible.

Según explicó el medio Extremetech, este tipo de maniobras, conocidas como asistencias gravitatorias o slingshots, son esenciales para misiones de largo alcance. En lugar de depender de grandes cantidades de propulsor, la nave se vale del impulso gravitacional de planetas y lunas para ajustar su trayectoria y ganar energía.

En este caso, la cercanía a Venus obligó a la ESA a apagar la mayoría de los instrumentos de la nave para protegerlos del calor, incluso utilizando la antena de alta ganancia como un escudo térmico improvisado.

JUICE ya había completado sobrevuelos anteriores alrededor de la Tierra y la Luna, y realizará en total 25 asistencias gravitatorias antes de llegar a destino. La próxima ocurrirá en 2026, cuando vuelva a pasar por la órbita terrestre para continuar afinando su ruta.

Una vez que arribe a Júpiter en 2031, la misión desplegará toda su capacidad científica. Entre 2031 y 2034, JUICE efectuará 35 sobrevuelos de las lunas jovianas, con especial atención en Europa, Calisto y Ganímedes. Finalmente, en 2035 se colocará en órbita permanente alrededor de Ganímedes, la luna más grande del sistema solar.