Investiga Uy es una asociación de investigadores del Uruguay que surgió en febrero de 2021, con el fin de discutir la situación actual de la investigación y el desarrollo y la “impostergable mejora en la inversión”.

En aquel entonces se procesaban algunos cambios en el funcionamiento de la gobernanza y el sistema I + D (Investigación + Desarrollo” y sobre el funcionamiento de la Agencia Nacional de Investigación e Innovación (ANII).         

El presidente de Investiga Uy es el astrónomo Gonzalo Tancredi, que en diálogo con Montevideo Portal habló de la importancia de que surja esta agrupación ya que “hay organizaciones gremiales o de docentes universitarios, pero no algo que conjugara el interés de todos los investigadores”. “Somos una de las voces válidas y reconocidas en el ámbito del funcionamiento de investigación y desarrollo”, acotó.

“En marzo de 2021 tuvimos una asamblea en formato virtual con casi 1.000 participantes a través de Zoom y siguiéndolo por Youtube. Se habló de la situación del país en materia de I + D, y se aprobó una resolución que generaba el camino a la construcción de esta asociación.  Se conformó una comisión provisoria que hizo una propuesta de estatutos, a su vez comenzando una investigación conjunta de la situación de la ciencia, tecnología e innovación y la I + D en Uruguay”, agregó.

Tancredi contó que hicieron documentos sobre I + D y en julio de 2021 “se hizo una nueva asamblea para aprobar el estatuto” en la que “participaron cerca de 500 investigadores y se fueron sumando más en los días siguientes”.

El estatuto es de una asociación civil, pero con la particularidad de que está integrada por investigadores. “Definimos investigadores como aquellas personas que están categorizadas en algún sistema, como el Sistema Nacional de Investigadores o el Régimen de Educación Total de la Universidad de la República (UdelaR) o que las instituciones del investigador lo consideren como tal”, expresó el astrónomo.

“En segunda instancia está la variabilidad de ramas del conocimiento que abarcamos, toda persona que fuera investigador, más allá de su línea de investigación, podía ser miembro y eso iba a estar reflejado en cuanto a los órganos de conducción de la asociación y su comisión directiva”, añadió. Además, tuvieron en cuenta la paridad en relación a la orientación de género, que haya igual número de hombres y mujeres.

Después de aprobado el estatuto continuaron con una campaña de socios, en este momento son 925 socios de Investiga Uy. Eso constituye casi el 50% de los investigadores categorizados en las instituciones mencionadas.

Se hicieron elecciones para integrar la directiva y del presidente, cuando fue designado Tancredi. “Tenemos investigadores de la UdelaR y de institutos de investigación como el Institut Pasteur, Instituto de Investigaciones Biológicas Clemente Estable (IIBCE), Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (INIA), Universidad Tecnológica del Uruguay (UTEC) y universidades privadas. Hay más de 25 instituciones con integrantes en Investiga Uy”, explicó Tancredi.

Foto cedida a Montevideo Portal

Foto cedida a Montevideo Portal

Presentaciones y conversatorios

Investiga Uy ha trabajado en políticas de I + D, generado documentos, artículos de prensa y realizado seminarios y conversatorios. En una primera edición llevaron a cabo un conversatorio en la Sala Acuña de Figueroa del Parlamento Nacional, y tienen prevista otra instancia a fines de mes.

En el primero hablaron sobre la gobernanza en I + D y en el segundo tratarán temas presupuestas y sobre la financiación de la investigación. “Estas son dos de las preocupaciones principales que tenemos”, dijo Tancredi.

“En la reorganización de la gobernanza sabemos que a nivel del Poder Ejecutivo se viene trabajando en el tema y se han realizado consultorías para diagnosticar la situación y armar un nuevo plan estratégico en Ciencia, Tecnología e Innovación”, expresó el presidente de Investiga Uy.

“Con respecto al tema presupuestal, de la inversión en general y no solo del Estado sino también de empresas públicas y privadas, es algo que nos preocupa y hay que avanzar. Ha habido un estancamiento en cuanto a inversión”, añadió.

El astrónomo explicó que han mantenido reuniones y conversaciones para expresar su preocupación por estos temas con la Agencia Nacional de Investigación e Innovación (ANII), el Consejo Nacional de Innovación, Ciencia y Tecnología (CONICYT), la Academia Nacional de Ciencias del Uruguay (ANCiU) y la Dirección de Innovación, Ciencia y Tecnología del Ministerio de Educación y Cultura (MEC).

La necesidad de aumentar el presupuesto

Con respecto al anhelo de incrementar el presupuesto, Tancredi dio datos actuales y en comparativa de nuestro país con otros de ingresos medios o altos. “Uruguay tiene una inversión en I + D que no alcanza el 0,5% del PBI, prácticamente en ningún momento se llegó a superar ese porcentaje. Si uno lo compara con países con un nivel de desarrollo comparable estamos muy por debajo”, aseveró el investigador.

“El número de investigadores que tenemos por 1.000 habitantes es muy bajo, de uno cada 1.000 habitantes de la población económicamente activa. Otros países de la región tienen números que nos multiplican por dos, tres o cuatro, como es el caso de Argentina. Hay falta de inversión, hay mucho para formar investigadores”, agregó.

En ese sentido, Tancredi consideró que “si bien hubo cambios en las últimas décadas, en los últimos años hubo un estancamiento en los números en cuanto a inversión”. “Eso ha pasado en los últimos cuatro o cinco años, no solo desde que está este gobierno. Esa caída se ha visto por ejemplo en la ANII, que es el principal organismo de financiación, su presupuesto en dólares ha caído a casi la mitad de 2015 a 2021. Nuestros insumos son principalmente en dólares, compramos equipamientos y reactivos en el exterior en dólares. De ahí que para nosotros el presupuesto en dólares es relevante”, explicó.

El presidente de Investiga Uy comentó que los proyectos que ha apoyado la ANII “han tenido una caída impresionante”. “Un proyecto en el 2017 tenía unos 45 mil dólares (por ejemplo, de Fondo María Viñas o Fondo Clemente Estable, de dos años de investigación), algo que era muy bajo en términos internacionales, pero eso hoy en día es de 23 mil dólares. Con ese dinero hay que pagar en muchos casos sueldos de becarios para que hagan gran parte de la investigación”, dijo a modo de ejemplo.

“El número de becas de posgrado se ha estancado y ha caído en los últimos años, ese es gran parte del recurso humano que hace la investigación. Todo eso marca una situación muy crítica”, acotó.

Tancredi recordó que “la comunidad científica en su conjunto mostró una madurez para enfrentar problemas como la pandemia”, pero “eso no se ha visto reflejado en un mayor apoyo” y “este año es crítico en términos presupuestales”.

“Es la Rendición de Cuentas de mitad de gobierno donde debe haber cambios en la tendencia de caída o estancamiento y comenzar un proceso de franco crecimiento en todas esas líneas”, aseguró el astrónomo.

También tienen otras preocupaciones como que “la voz de los investigadores esté presente” y promovieron que “haya un delegado de los investigadores en el CONICYT y un representante del ámbito académico en el directorio de la ANII”. “Ese lugar está vacante hace más de un año”, dijo Tancredi.