Incendios forestales en Rocha afectaron flora exótica y hábitat natural de especies

Los incendios forestales ocurridos en diciembre de 2019 en el balneario La Esmeralda y en Santa Isabel de La Pedrera dejaron un saldo de más de 2.000 hectáreas quemadas y varias viviendas afectadas.

Sin embargo, poco se sabe de la destrucción de la flora exótica y el hábitat natural de varias especies que el fuego provocó en ambos balnearios.

Martín Abreu, vicepresidente de la ONG Coendú (Conservación de Especies Nativas del Uruguay, explicó a Montevideo Portal que no se ve "el lado ambiental del problema" y cree que "debería haber un plan estratégico para recuperar los sitios como eran antes de los incendios".

"Rocha es de los lugares más privilegiados en cuanto a aves, pero tiene muchas especies con problemas de conservación. Lo mismo pasa con el reptil, ya que también hay una cantidad importante de estas especies que se vieron afectadas por los incendios", explicó Abreu.

"No se tiene mucho respeto por la naturaleza, no se cuida y no se considera que la arena tiene que moverse, que debería haber un monte que no fuera el monte exótico que hay hoy", agregó.

El integrante de la ONG Coendú cree que "vemos el hoy y no vemos mucho el mañana". "Quizás una estrategia sea terminar con el avance del monte exótico, de a poco. Debería haber un plan estratégico para empezar a recuperar los sitios como eran. Antes gran parte eran arenales", señaló.

"Somos muy pocos los que ven el lado ambiental, todos lo ven del lado económico, donde también el saldo es negativo y no es productivo", añadió.

Abreu explicó que "existe una infinidad de especies de flora y fauna, algunas también amenazadas" que se ven afectadas por el fuego.

"Podemos encontrar en toda ésta zona costera, parches de bosques psamófilos, matorral espinoso, matorral de candela, caraguatales, juncales, pajonales, espartillares, totorales, hunquillares, herbazales psamófilos, calagualares, herbazales rupícolas, espartillares psamófilos y estepas psamófilas. Asociado a cada uno de estos ambientes, muy diferentes entre sí, hay muchas especies de flora y fauna que se queman, para luego prevalecer especies como la acacia que luego del fuego se propaga, colonizando nuevos sitios", agregó.

El naturalista dijo a Montevideo Portal que "las zonas exclusivas de flora exótica fueron prácticamente quemadas en su totalidad al paso del fuego. Además, en sitios donde había remanentes de flora nativa, pero invadido por acacias y pinos, también se quemó total o parcialmente".

"En zonas donde el monte psamófilo estaba bien conservado el fuego no logró entrar como sucedió en algún parche de Santa Isabel o en el bosque nativo situado al oeste de la Laguna Redonda en La Esmeralda", comentó Abreu.

"Es importante constatar también que, en el caso de la Laguna Redonda, que está rodeada por vegetación palustre, la misma se incendió casi íntegramente en plena temporada reproductiva de cientos de aves que allí anidan, y que sirve de refugio a innumerables especies de mamíferos, anfibios, reptiles, e invertebrados, algunos de ellos con problemas de conservación", agregó.

Además, Martín Abreu explicó que "toda la zona costera del departamento de Rocha es importante para la conservación de centenas de especies, donde podemos destacar algunas como el Burrito Plomizo (Porzana spiloptera) entre las decenas de aves que utilizan ésta parte del territorio, entre los mamíferos las Marmosas (Cryptonamus), el Tucucu de Pearson (Ctenomys pearsoni) o el Apereá de Dorso Oscuro (Cavia magna) todos con un grado importante de amenaza y presentes en la zona afectada".

Otras especies que podían encontrarse en esa zona son: "el Sapito de Darwin (Melanopryniscus montevidensis) especie en peligro crítico, el Escuerzo Grande (Ceratophrys ornata) del cual sus últimos registros del país proceden de la costa rochense, la Ranita de Bibron (Pleurodema bibroni) cuyos registros actuales proceden de ambientes psamófilos costeros principalmente, la Lagartija de la Arena (Liolaemus occipitalis) con distribución restringida en el país a la faja costera rochense llegando hasta el arroyo Valizas en su límite sur de distribución, o la Culebra Acintada (Taeniophalus poecilopogon) muy poco común y que utiliza éstos ambientes".

Abreu sostiene que "el impacto del fuego sobre las comunidades florísticas, las de pequeños mamíferos, reptiles y anfibios, como así también sobre sitios de reproducción de aves es importante y es necesario comenzar a visualizarlas y a valorarlas".

Montevideo Portal