Google admite que la web abierta está en “rápido declive”

Google reconoció por primera vez que la web abierta atraviesa un “rápido declive”, según consta en documentos judiciales vinculados al juicio antimonopolio que enfrenta en Estados Unidos por su dominio en el mercado de la publicidad digital.

El reconocimiento supone un giro respecto a declaraciones recientes de la compañía, que defendía que la incorporación de funciones de inteligencia artificial (IA) en su buscador no había reducido el tráfico, sino mejorado la calidad de los clics hacia sitios web.

Un cambio de discurso en plena presión judicial

En agosto, Google había asegurado —sin aportar cifras— que los clics orgánicos se mantenían estables en volumen interanual y que los “clics de calidad” habían aumentado, en referencia a interacciones en las que los usuarios permanecían en la página visitada.

Sin embargo, en su escrito judicial, la compañía admite que la generalización de resúmenes y respuestas directas generadas por IA está afectando a los editores y acelerando la pérdida de tráfico hacia la web abierta.

El Departamento de Justicia de EE. UU. ha recomendado que Google se desprenda de parte de su negocio publicitario. La empresa replica que esa medida “aceleraría aún más la caída”, en perjuicio de los medios que dependen de la publicidad gráfica en línea.

Impacto en medios y creadores de contenido

Las advertencias sobre la disminución del tráfico no son nuevas. El CEO de Cloudflare, Matthew Prince, anticipó que la consulta de información pasaría progresivamente de las páginas originales a los resúmenes automáticos generados por IA.

Un estudio del Pew Research Center en EE. UU. confirmó esa tendencia: los usuarios hacen menos clics en enlaces externos cuando se les ofrecen respuestas inmediatas en el buscador.

Con información de Europa Press