Eduvaluer: la plataforma uruguaya que mide el bienestar emocional en las aulas

En medio de crecientes desafíos en las aulas latinoamericanas —desde el aislamiento social hasta los conflictos invisibles entre pares—, una startup uruguaya propone una herramienta concreta para actuar a tiempo. Se trata de Eduvaluer, la primera plataforma digital de la región creada para monitorear el bienestar socioemocional de estudiantes y mejorar la convivencia escolar con datos objetivos.

Desarrollada por los emprendedores Juan Pablo Zufriategui, Pablo Fleurquin y Alejandro Hughes, la plataforma ya se utiliza en instituciones educativas de Uruguay, Argentina y Costa Rica, y apunta a llegar a 25 colegios activos en la región hacia fines de 2025.

Cómo funciona

Eduvaluer combina encuestas socioemocionales, sociogramas interactivos y algoritmos de agrupamiento escolar. Con esta información, permite identificar a tiempo señales de malestar, aislamiento, dependencia social o incluso liderazgo positivo. Los resultados se presentan en visualizaciones accesibles para docentes, psicólogos y equipos de orientación, y permiten generar alertas para intervenir antes de que los conflictos se hagan visibles.

“La plataforma nació al ver a mi madre psicóloga tratando de formar grupos de clase con papelitos y un pizarrón. Era ineficiente y generaba frustración”, recuerda Zufriategui. Hoy, esa experiencia dio paso a una solución tecnológica validada por equipos profesionales y respaldada por criterios científicos.

La función más valorada por los colegios, según sus creadores, es la de armado automatizado de clases, que combina variables objetivas (equilibrio de género, tamaño del grupo) con vínculos sociales detectados por la herramienta. Esto permite evitar combinaciones problemáticas o reforzar relaciones de apoyo, reduciendo conflictos y quejas de las familias.

Apoyos y expansión

Eduvaluer fue incubada por Ingenio (ANII) y recibió un financiamiento inicial de USD 75.000. Además, fue reconocida por el Departamento de Educación de EE. UU., que impulsa su implementación en la región, y preseleccionada por un programa de UNICEF para soluciones escalables de alto impacto.

Aunque su adopción actual se da principalmente en escuelas privadas, sus desarrolladores mantuvieron reuniones con Codicen y Ceibal en Uruguay con vistas a una prueba piloto en el sistema público, que podría marcar un antes y un después en la gestión emocional y social de los entornos educativos.