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Contenido creado por Laura Meléndez
Ciencia

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Divulgan datos del primer estudio sobre experiencias cercanas a la muerte

Los resultados del estudio Aware, iniciado en 2008, sugieren que la muerte amerita una investigación seria y sin prejuicios, que permita comprenderla mejor como "proceso".

08.10.2014 08:31

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2014-10-08T08:31:00-03:00
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Luego de seis años de haber iniciado el primer estudio a gran escala de las llamadas "experiencias cercanas a la muerte", el equipo de científicos de la Universidad de Southampton, en el Reino Unido, divulga los resultados, después de analizar a 2.060 pacientes en muerte clínica (por paro cardiaco) que fueron atendidos en 15 hospitales de diversos países.

Los resultados de la investigación, publicados en la revista Resuscitation, señalan, entre otras cosas, que la conciencia parece darse durante un período de tres minutos tras la pérdida de latido, a pesar de que se considera que el cerebro deja de funcionar después de 20 o 30 segundos de haberse producido el paro cardiaco.

En un comunicado librado por la Universidad de Southampton, se señala que los temas relativos a la experiencia de la muerte parecen ser mucho más amplios de lo que hasta ahora se había contemplado.

Por otra parte, se constata que, en algunos casos de paro cardíaco, los recuerdos de conciencia visual compatibles con las llamadas experiencias extracorpóreas (sensación de estar flotando proyectado fuera del cuerpo) pueden corresponderse con hechos o situaciones reales.

Los científicos señalan que esta circunstancia podría darse en un porcentaje más alto de pacientes del registrado, pues muchos de estos pierden sus recuerdos tras la resucitación, por el efecto, sobre los circuitos de la memoria, de lesiones cerebrales o de la sedación.

Asimismo, los investigadores afirman que términos científicos ampliamente utilizados para describir este tipo de situaciones -como los ya mencionados "experiencias cercanas a la muerte" o "experiencias extracorpóreas"- podrían no ser suficientes para describir la verdadera experiencia de morir y su diversidad.

Además, señalan que los estudios futuros al respecto deberían centrarse en situaciones de paro cardíaco, biológicamente sinónimas de muerte, en lugar de en otros estados médicos a veces mal definidos como "cercanos a la muerte".

Concluyen que los resultados obtenidos confirman que la muerte amerita una investigación seria y sin prejuicios, que permita comprenderla mejor como "proceso". "Contrariamente a lo que se cree, la muerte no es un momento específico sino un proceso potencialmente reversible, que ocurre después de cualquier enfermedad o accidente grave y hace que el corazón, los pulmones y el cerebro dejen de funcionar", explica el Dr. Sam Parnia, autor principal del estudio.

Parnia es profesor asistente de medicina de cuidados críticos en la Universidad Estatal de Nueva York, donde dirige el proyecto de investigación "Resurrección" (Resuscitation Research) y es miembro de la unidad de medicina pulmonar y cuidados críticos de la Universidad de Cornell en Nueva York. Es conocido por ser un destacado experto en la investigación de las experiencias cercanas a la muerte.
El estudio Aware utilizó una sofisticada tecnología de análisis del cerebro y la conciencia humanos, durante las paradas cardiorrespiratorias. Asimismo, examinó la capacidad de "ver" y "oír" durante el estado de muerte clínica, y fue completada con tests psicológicos y técnicas de registro de la actividad cerebral.

Porcentajes

Pero el proyecto Aware va más allá de todas estas investigaciones, por su extensión. En porcentajes, reveló que un 39% de los pacientes analizados que sobrevivieron a un paro cardiaco y pudieron someterse a entrevistas estructuradas describían una percepción de conciencia durante el evento, pero curiosamente no tenían ningún recuerdo explícito de los acontecimientos.

Este hecho, según Parnia "sugiere que más gente tendría actividad mental inicialmente (en esa circunstancia), pero que no lo recuerdan tras su recuperación", por las razones antes explicadas (lesiones cerebrales o el efecto de la sedación).

Entre los que sí informaron de una percepción de conciencia concreta y completaron todas las entrevistas posteriormente, el 46% señaló haber experimentado una amplia gama de recuerdos mentales en relación con la muerte, no siempre compatibles con el término "ECM" comúnmente utilizado. Entre esas experiencias, había algunas de miedo y persecución.

Solo un 9% de estos individuos contó experiencias compatibles con el término ECM y un 2% compatibles con el concepto de "experiencias extracorpóreas", con recuerdos explícitos de "haber visto" y "escuchado" los acontecimientos que les rodeaban mientras estaban clínicamente muertos.

Uno de estos últimos casos fue validado mediante la utilización de estímulos auditivos durante el paro cardiaco. Además, los recuerdos detallados de percepción visual que contaron los pacientes fueron consistentes, según verificaciones realizadas, con los eventos acaecidos en realidad.

Un dato curioso que comenta Parnia es que, en todos estos pacientes, la conciencia pareció darse durante un período de tres minutos tras la pérdida de latido, a pesar de que se considera que el cerebro deja normalmente de funcionar después de 20 o 30 segundos de haberse producido el paro; y de que no se reactiva de nuevo hasta que el corazón se pone otra vez en marcha.