Contenido creado por Paulina Molaguero
Medioambiente

En el horno

Cuando la cocina de gas inflama el debate político en Estados Unidos

Demócratas alertan por peligrosidad del producto y por la contaminación que emite, mientras que republicanos defienden libertad de usarlo.

15.01.2023 19:02

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2023-01-15T19:02:00-03:00
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¿Cómo las cocinas de gas se convirtieron en un grito de guerra de los republicanos contra los demócratas, junto con la gestión de la pandemia o los temas sociales? Todo comenzó con unas declaraciones de un directivo de una agencia gubernamental que provocaron polémica.

En una entrevista reciente con la agencia Bloomberg, Richard Trumka, miembro de la Comisión de Seguridad de Productos del Consumidor (CPSC, por sus siglas en inglés), dijo que no se descartaba prohibir estas cocinas debido a la contaminación que emiten.

“Es un peligro oculto”, afirmó, refiriéndose a los posibles problemas respiratorios que pueden causar. “Todas las opciones están sobre la mesa. Los productos que no se puede hacer que sean seguros se pueden prohibir”. 

Bastó esto para que corriera el rumor de una prohibición inminente de las cocinas de gas y para hacer enardecer a los republicanos e internautas de derecha.

Desayuno y cena

Alborotados contra lo que consideran un posible intento de pisotear sus libertades, algunos se hicieron pasar por heraldos de la comida bien cocida, como el comentarista conservador Matt Walsh, quien aseguró que “las cocinas eléctricas son nulas”.

Otros defendieron a los más desfavorecidos e hicieron hincapié en que las cocinas de inducción son caras. “Los demócratas van a por vuestros electrodomésticos de cocina”, dijo el senador Tom Cotton de Arkansas. “Su deseo de controlar todos los aspectos de vuestra vida no tiene límites, incluida la forma en que preparas el desayuno”, tuiteó. 

El congresista por Carolina del Sur, Jeff Duncan, lo consideró un nuevo “abuso de poder” por parte de la administración Biden. “Los burócratas de Washington no deberían opinar sobre cómo los estadounidenses cocinan su cena”, tuiteó. 

Y al igual que otros internautas, el congresista por Florida Matt Gaetz publicó con orgullo un video de un hornillo de una cocina de gas, que constituyen el 35 % de las existentes en Estados Unidos. 

“¡Habrá que venir y arrebatármelo de las manos!”, escribió, retomando una fórmula popularizada por el actor Charlton Heston, presidente durante mucho tiempo del poderoso lobby armamentista Asociación Nacional del Rifle, que la pronunció en 2000 blandiendo un rifle para advertir a los demócratas contra cualquier intento de acotar las armas de fuego.

En la misma línea, el congresista de Ohio Jim Jordan publicó un tuit que suena a lema: “Dios. Armas de fuego. Cocinas de gas”.

“Tendencias ridículas”

Así las cosas, la Casa Blanca y el jefe de la Comisión de Seguridad de Productos de Consumo tuvieron que pronunciarse. 

“El presidente [Joe Biden] no apoya la prohibición de las cocinas de gas”, dijo su portavoz Karine Jean-Pierre. Y la comisión, “que es independiente, no prohíbe las cocinas de gas”. 

“Para ser claro no pretendo prohibir las cocinas de gas”, escribió Alex Hoehn-Saric, director de la CPSC, y recordó que, según estudios, “las emisiones de las cocinas de gas pueden ser peligrosas”. 

Investigaciones recientes (que no son unánimes) acusan a la cocción a gas de ser responsable de aproximadamente el 12 % de los casos de asma infantil en Estados Unidos y Europa. Pero esto no ha amainado las reacciones indignadas de la derecha.

El acalorado debate sobre los fogones es el perfecto “ejemplo de las tendencias más ridículas de la política estadounidense”, estimó sin rodeos el jueves una columna publicada en la revista The Atlantic. “Una nimiedad puede convertirse en una gran controversia, sin ninguna buena razón”.

Inès Bel Aïba para AFP