Contenido creado por Martín Laitano
Medioambiente

Agua verde y no del Caribe

Cianobacterias: ¿cómo se apoderaron de las playas de Uruguay?

El accionar humano influye directamente en la creación de estas bacterias que dejan al descubierto el cambio climático.

20.02.2019 18:33

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2019-02-20T18:33:00-03:00
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Montevideo Portal

Las playas de Montevideo tienen, por enésima vez, algunas banderas sanitarias debido a las cianobacterias que se alojaron en el agua de las costas. Pero no solo la capital ha sufrido la invasión, ya que en diversas ocasiones se vio el agua verde desde Colonia hasta Rocha.

Montevideo Portal consultó al doctor Ernesto Brugnoli, quien pertenece a la cátedra de la Facultad de Ciencias dentro del Instituto de Ecología y Ciencias Ambientales, quien señaló que las cianobacterias "son un indicador que refleja un proceso de enriquecimiento de nutrientes" en el agua, lo que "genera floraciones algales". En definitiva, no es algo puntual que ubique las causas en este verano, "sino que es el reflejo de un proceso".

Principalmente, Brugnoli señaló que el aumento de las cantidades de nitrógeno y fósforo en el agua, acompañado de un incremento de las temperaturas en el agua dulce, conforman un paquete de "condiciones ambientales" que, en este verano, se vieron favorecidas por el incremento del caudal del Río Uruguay, debido a las lluvias.

En definitiva, todo lo que arrastra el Río Uruguay, desde Brasil, Argentina, algunos afluentes de Paraguay, y finalmente de Uruguay, va a parar al Río de la Plata.

"El problema es que estamos al oriente del Río Uruguay, que es un rio transnacional. En parte, el problema es nuestro, pero también hay que mirar hacia arriba", analizó Brugnoli.

Asimismo, muchas voces relacionadas al sector del agro, al medioambiente o la ciencia se han manifestado en los últimos días sobre este hecho, y han apuntado a diversas causas como la principal de este problema.

Por ejemplo, el ingeniero agrónomo César Vega, precandidato presidencial por el Partido Ecologista Radical Intransigente (PERI), grabó un video la semana pasada en donde apunta que "el agua está más caliente debido al cambio climático", y afirmó que esta condición favorece la creación de las algas. "El agua es como una pila: acumula calor cada día. No se necesita que el agua suba cinco, seis, diez grados para que sucedan estos fenómenos naturales", aseguró.

"Hay cianobacterias porque estamos alimentando esas aguas con una gran cantidad de materia nitrogenada y materia fosfatada. Eso deriva de los fertilizantes que se están usando en un paquete tecnológico totalmente equivocado acompañado de glifosato y otros herbicidas que produce erosión laminar", explicó.

Por otra parte, apuntó al uso de detergentes y al saneamiento como otra causa de la acumulación de cianobacterias. "Los detergentes que se usan en el Uruguay no tienen ningún control de la cantidad de fosfato. Son de cuarta los fosfatos que se usan en los detergentes. Ningún control hay. Todo va para el río", sentenció.

Vega señaló que las autoridades tendrán que analizar qué hacen "para no tirar tanta cantidad de pichí y caca y detergente a los ríos". "Si no la triste noticia es que no nos vamos a poder bañar más en las playas ni comer pescado", opinó.

Por su parte, el ingeniero agrónomo Eduardo Blasina escribió en su columna para el diario El Observador que se le podría agradecer a las cianobacterias por haber llegado a Punta del Este, porque puede que ayude a abrir los ojos ante diversos problemas.

"Nos están avisando que algo está muy mal", apostilló y opinó: "Es necesaria una política de aguas que proteja el borde de los cursos de ríos y arroyos".

"Es necesario repensar la agricultura y la ganadería, de modo que el fósforo y el nitrógeno con el que se fertiliza no terminen en los cursos de agua y de modo que las heces de los animales -que son bombas de fósforo- tampoco terminen en el agua. Capturar carbono y retener nitrógeno y fósforo en los suelos. Es por el exceso de fósforo y nitrógeno en las aguas y el calor que las cianobacterias se reproducen sin pausa", agregó.

Pero para quienes vayan a la playa y se encuentren con el agua verde y, tal vez, la bandera sanitaria, según los experos es necesario tomar precauciones. Principalmente, los niños. En lo posible se debe evitar el baño en el agua y, en especial, tratar de no ingerirla.

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