Amazon dio un paso decisivo en la carrera por dominar el internet satelital al lanzar su programa beta de Amazon Leo, su respuesta directa a Starlink, el servicio de SpaceX. Aunque la fase de prueba inicial está limitada a clientes empresariales seleccionados, como JetBlue y Hunt Energy Network, el anuncio posiciona a la compañía de Jeff Bezos como un competidor de peso en el sector de conectividad satelital de alta velocidad.

La oferta inicial incluye el uso de la nueva antena Leo Ultra, que según Amazon es la más rápida en su clase actualmente en producción. Se trata de una antena de matriz en fase full-duplex que permite descargas de hasta 1 Gbps y cargas de hasta 400 Mbps, cifras que rivalizan directamente con las metas anunciadas por SpaceX para su red Starlink.

“La antena Leo Ultra es la más potente de nuestra línea y la primera diseñada para maximizar rendimiento en aplicaciones empresariales exigentes”, destacó Amazon en un comunicado.

Una estrategia gradual, centrada en empresas

Aunque se trata de la primera vez que Amazon Leo se ofrece a usuarios reales, la empresa optó por comenzar con clientes corporativos de alto perfil, apuntando a sectores que dependen de conectividad constante y robusta en ubicaciones remotas o de difícil acceso.

Esta etapa de “vista previa” forma parte de la estrategia escalonada de Amazon para posicionar su constelación de satélites en órbita terrestre baja (LEO), la misma arquitectura que utiliza Starlink, pero con antenas optimizadas para entornos comerciales e industriales.

Una competencia cada vez más orbital

El avance de Amazon se produce mientras SpaceX sigue ampliando su cobertura y base de usuarios con más de 2 millones de clientes globales, y cuando otras empresas como OneWeb, Viasat y Telesat intentan también ganar cuota de mercado en la llamada nueva era de internet satelital.