El sistema de internet satelital de Amazon, conocido como Leo (anteriormente Proyecto Kuiper), se lanzará en 2026 con una cobertura casi global, aunque dejará afuera, por el momento, las regiones polares. La situación es similar a la que atravesó Starlink de SpaceX en sus primeros años de despliegue.
Aunque el objetivo de Amazon Leo es alcanzar cobertura mundial, su constelación inicial de más de 3.200 satélites solo operará entre los 56 grados de latitud norte y sur, lo que excluye grandes áreas de Alaska, partes del norte de Canadá y del norte de Europa.
Una diapositiva compartida en una reciente presentación de Amazon en el evento AWS re:Invent 2025 confirmó que el sistema de primera generación de Leo no brindará conexión fuera de ese rango geográfico. En 2019, la solicitud regulatoria original de Amazon ya anticipaba esta limitación: "la cobertura comienza en las latitudes 56°N y 56°S y se expande rápidamente hacia el ecuador a medida que se lanzan más satélites".
La compañía ya ha iniciado una beta privada del servicio para empresas seleccionadas. Mientras tanto, su socio de lanzamientos, United Launch Alliance, también detalló en redes sociales que los satélites operarán dentro de esos mismos 56 grados al norte y al sur del ecuador.
Expertos del sector, como el analista Carlos Plácido, han compartido mapas orbitales que confirman que los primeros satélites de Leo no cruzan las regiones polares, algo que probablemente cambie en futuras etapas del proyecto.