Velvet D’Amour, pionera del modelaje plus size

"Pesaba 57 kilos y aun así les resultaba demasiado gorda", recuerda Velvet D'Amour, modelo de 46 años que se ganó el aplauso de millones de hombres y mujeres por romper dos rígidos estereotipos del mundo de la moda: la delgadez extrema y la juventud imprescindible.

Nacida en Nueva York y actualmente instalada en París, D'Amour fue dejada de lado por agentes del mundo de la moda cuando tenía sólo 17 años. Al parecer, sus ya mencionados 57 kilos la dejaban fuera del canon de esbeltez al uso.

Irónicamente, esta rubia yanqui de menos de 1.60 de estatura, tuvo su revancha a los 38 años de edad, cuando pesaba 136 kilos.

Esta semana se lanzó el cuarto volumen de su revista "Vol Up 2", publicación centrada en todas las formas de diversidad. Uno de los objetivos de la publicación es alentar a las mujeres a aceptar con orgullo su cuerpo, incluyendo las presuntas "imperfecciones".

Velvet lanzó la revista trimestral en febrero del año pasado, y la iniciativa ha sido más que bienvenida. "Las modelos que parecen las principales publicaciones no se ven felices. Y si ellas no son felices, ¿quién lo es?", se pregunta.

"Todas las imágenes de belleza femenina que vemos en los medios, son en verdad la misma imagen: una chica blanca como de 16 años totalmente demacrada. Las personas mayores quedan excluidas, y las diferentes etnias no se muestran", lamenta.

D'Amour se interesó en el mundo del modelaje cuando, siendo muy jovencita, se mudó a Manhattan para estudiar artes visuales. Dueña de una belleza natural, sus compañeros solían preguntarle si era modelo.

En el comienzo de su luego interrumpida carrera, la agencia IMG -que ha representado a celebridades como Gisele Bundchen y Heidi Klum- se interesó en ella, aunque evidentemente no daba con el peso que ellos buscaban. La joven, sintiéndose avergonzada de su supuesta gordura, hizo enormes esfuerzos hasta alcanzar su marca mínima: 57 kilos. Pero esa masa seguía siendo excesiva para la agencia, Velvet dio el portazo y se largó.

Sintiéndose rechazada , se dedicó de lleno a la fotografía , y pasó un año en Italia estudiando junto al fotógrafo estadounidense James White , antes de regresar a Nueva York.

D' Amour recuerda que cuando su peso volvió a aumentar, ella se sentía avergonzada de su cuerpo. Pero cuanto más trabajaba con modelos " perfectas y de aspecto infeliz", la situación cambió
"Comencé fotografiando modelos y esa fue la clave de la aceptación de mi cuerpo", explica en declaraciones citadas por Daily Mail.

"No me sentía nada bien con mi cuerpo mientas estaba fotografiando a mujeres que se suponía que encarnaban el ideal de la belleza", cuenta. Sin embargo, no tardó en descubrir que esas modelos no estaban felices consigo mismas. "Fue una gran revelación", afirma.

"Ahí estaba yo, odiando mi cuerpo y parada en medio de esos ideales de belleza femenina que también odiaban sus cuerpos. No pude menos que preguntarme qué estaba pasando", narra.
Cuando Agence Plus, la primera agencia francesa de modelos "rollizas" abrió sus puertas en París, D' Amour , que ya vivía en esa ciudad , se ofreció como fotógrafa-

"Les mostré mi trabajo para que tuvieran una idea de mis capacidades, pero la carpeta también incluía fotos de mí misma, para que vieran que tenía experiencia en tallas grandes, y me dijeron ‘Bueno, queremos fotografiarte a ti'", rememora.

"Fue muy irónico, me estaban fotografiando como modelo ¡A los 38 años y pesando más de cien kilos!", detalla. La modelo consideró esto "una victoria personal para todas las luchas que pasé para aceptar mi cuerpo, y las montañas rusas de subir y bajar de peso por las que pasé".

Poco más tarde llegaría a los titulares de la prensa, luego de modelar para Jean -Paul Gaultier en la Semana de la Moda de París de octubre 2006. Luego supo ser tapa de Vogue, realizar varias producciones Sus detractores la han acusado de "promover la obesidad", pero ella insiste en que es una mujer saludable y no tiene presión arterial alta o problemas de colesterol. A diferencia de muchos de sus contemporáneos, ella dice que no abuse de las drogas , el alcohol o los cigarrillos .

"Para aquellos que pasan sus noches hasta retorciéndose de preocupación por mi salud, recuerdo que hay muchos ejemplos de modelos y celebridades supuestamente saludables que no lo son tanto. De hecho algunos ya se han muerto de tan sanos que estaban, pero nunca se les negó el acceso a los medios".

"Muchas mujeres sufren por su imagen corporal, despiertan cada día detestando lo que ven en el espejo , ¿creen sinceramente que pretender que la gente gorda no existe, aporta algo positivo para cambiar la situación?"

"Si hay alguna pizca de sinceridad en su preocupación fingida sobre la salud de una persona gorda , entonces en vez de burlarse de nosotros cuando lleguemos al gimnasio o pista, tómense un segundo para animar a alguien hacia una mejor la salud".

"Al fin y al cabo, la verdadera belleza no está envuelta en Dior o Lanvin , son los simples actos de bondad que han hecho una diferencia en las vidas de los demás , algo que la celulitis y las arrugas no pueden borrar", concluye.