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Un repaso por los 1.000 números de Galería

Temas, personajes, hitos y el simple paso del tiempo marcan el camino de esta revista, que cambió para seguir siendo la misma

02.04.2020

Lectura: 14'

2020-04-02T06:00:00
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Por Leonel García

Los ojos almendra, el pelo castaño claro y el rostro hermoso, naif y sensual a la vez, Natalie Kriz gobernaba la portada, la primera vez que galería salió a la calle, el 28 de setiembre de 2000. Desde el número uno, la revista dio destaque a los uruguayos que jugaban en las distintas grandes ligas de todos los ámbitos. Kriz, una modelo de 19 años, que en persona era "tan o más hermosa que en las fotos", según la entrevista que le hizo Daniela Bluth, hoy directora de esta publicación, ya era la imagen del Club Med, había participado en campañas en 19 países de cuatro continentes, conducía los programas Domenica In y Quelli che il calcio en Italia, desfilaba para Versace y Roberto Cavalli, y compartía pasarela con colegas como Valeria Mazza, Cindy Crawford, Claudia Schiffer y Esther Cañadas.

Ese mismo número inicial también era premonitorio: en la página 5, en la primera foto de la sección luego llamada Hall (la de los De más y De menos; la primera en ser leída, bah), Leo Barizzoni retrataba a dos bailarines uruguayos que habían venido a Montevideo a festejar los 25 años de la Escuela Nacional de Danza del Sodre. Ambos, egresados de ahí, desarrollaban sus carreras en Estados Unidos. Uno era Pablo Pérez, un joven de 22 años recién contratado por una compañía en Carolina del Norte, donde aún vive. La otra, que ya mostraba sus aptitudes artísticas, era una chica de 20 que transcurría su segunda temporada en el American Ballet Theatre de Nueva York: María Noel Riccetto.

Mil números, mil esfuerzos semanales, mil repasos a la realidad. Cierto es que galería no es una publicación que corre tras la noticia, pero cada número es un reflejo de la sociedad que se vive, sus tendencias, su gastronomía, sus expresiones culturales y su gente. También muestra luces y oscuridades. Sus ediciones son, vale decirse, registros de la historia. El primer número informaba sobre la medalla de plata del ciclista sanducero Milton Wynants en los Juegos Olímpicos de Sidney que aún se disputaban, el reciente lanzamiento de Music de Madonna y el intento uruguayo de hacer un espectáculo musical con Boom. En la entrevista de la última página, el músico y director de orquesta Federico García Vigil hablaba sinceramente de los problemas que tuvo con el alcohol, en una confesión que no era ?ni es? habitual en personalidades públicas, mientras que en su columna sobre sexo, el médico Gastón Boero respondía dudas sobre "la mal llamada píldora del día después". La reciente apertura del restaurante La Perdiz, en Punta Carretas, muy cerca de un centro comercial que apenas pasaba el lustro de abierto, comenzaba a erigir a ese barrio como un polo gastronómico.

En 2000 todavía rebotaba la estética de los años 90, más estridente que luminosa. En materia de viajes, se hablaba del hotel más grande del mundo, The Venetian en Las Vegas, definido como "una caja de bombones con licor", que recreaba artificialmente a la ciudad italiana Venecia, canales incluidos, en el desierto de Estados Unidos. Difícilmente cayera bien a la sensibilidad actual la consignación de una lucha de divas como Laetitia D'Arenberg y Cecilia Gallinal, criadoras de Jersey, en la Rural del Prado. Las hemerotecas definitivamente son un buen registro de cómo evolucionó el espíritu de los tiempos.

El bajón y el resurgir. Cien números en una revista semanal son prácticamente dos años. Para el 5 de setiembre de 2002, cuando galería llegaba a su número 100, ya habían aparecido los brotes de aftosa en Uruguay, en Argentina el estallido social había dejado cinco presidentes en pocos días, Uruguay había sufrido la peor crisis económica de su historia y el presidente Jorge Batlle había pronunciado su célebre "We are fantastic" cuando recién comenzábamos a asomar la nariz. El Mirador nos regalaba al magnate Donald Trump y a su entonces novia, Melania, mucho antes de que se convirtieran en presidente y primera dama de Estados Unidos, como público del US Open.

En esta época comenzaron a popularizarse terapias alternativas como la equinoterapia. En Uruguay se acababa de realizar el primer seminario internacional sobre el tema --todo llega tarde acá: los primeros registros en el mundo databan del siglo V antes de Cristo, Hipócrates mediante- y ya había casi 400 pacientes buscando mejorar su calidad de vida a lomo de caballo, según consignaba una nota de Gabriela Santini. El entrevistado de la última página era Jorge Temponi, entonces joven actor ("y masajista") de 26 que un año antes había sido uno de los protagonistas de 25 Watts, de Juan Pablo Rebella y Diego Stoll, película que parece haber protagonizado el último y definitivo resurgir del cine uruguayo.

Para cuando salió el número 200, el 19 de agosto de 2004, Montevideo vivía una explosión de comedias musicales. La jaula de las locas en el teatro Alianza (por Nacho Cardozo) y Chicago en la sala Moviecenter (dirigida por el recientemente fallecido Luis Trochón), seguían la estela tanto de la película Chicago (Oscar en 2003) como de La bien pagá, de Omar Varela, de 2002, uno de los bombazos teatrales en Uruguay en lo que va del siglo. Un artículo de María Inés Fornos daba cuenta de ello. Y como la revista siempre estuvo atenta al deporte, también había un perfil del inmenso nadador australiano Ian Thorpe, quien se impuso a Michael Phelps -otro coloso- en los 200 metros libres de los Juegos Olímpicos de Atenas.

Pero la noticia más importante para la cultura uruguaya esos días -para Uruguay en general- era la reapertura el 25 de agosto del Teatro Solís, con una nueva estructura y un nuevo modelo de gestión, una gala lírica y espectáculos populares ya agendados como los de Jorge Drexler, Bajofondo Tango Club, Fito Páez, Gilberto Gil y Laura Canoura, entre otros. La principal sala de Montevideo llevaba siete años cerrada. La ciudad estaba volviendo a encender sus luces.

Hoy tal como ayer. Cien números más adelante, el 3 de agosto de 2006, se reflejan dos situaciones que perfectamente podrían publicarse hoy. Está el boom de Dubái, la pequeña ciudad-Estado de los Emiratos Árabes Unidos que crecía a niveles increíbles y que proyectaba una isla artificial en forma de palmera, hoy una realidad. En esos momentos todavía sorprendía, aunque nadie imaginaba que llegaría a organizarse un mundial en esa zona, a fuerza de petrodólares (Catar 2022).

Conchillas esperando resugir, 2008

El otro caso era el de un artículo de Pía Supervielle titulado La barrera invisible y sus franqueadoras, sobre cuatro mujeres CEO que se abrían camino en el país. Se hablaba del "techo de cristal", de que las mujeres nunca superaban el 20% de los cargos gerenciales o directivos en Uruguay. "Ser la única mujer en un equipo de hombres y en una actividad que parece masculina, no ha sido fácil. De alguna manera nosotras tenemos que rendir más cuentas que los hombres y estar todo el tiempo demostrando que somos capaces de ocupar los mismos puestos que ellos", decía Anabel Salaberry, una de las consultadas, gerenta de Administración y Finanzas de la empresa marítima Christophersen. Fue en 2006; podría haber sido publicada -lamentablemente- hoy.

Por aquella época, lo gastronómico comenzaba a ser trendy y ser chef, una profesión cada vez más popular y difundida. Uno de ellos era Juan Pablo Capdepón, el Negro, que en la entrevista de última página defendía la movida de la slow food y se decía amante de la caza. Capdepón, pionero de la nueva camada de cocineros mediáticos, falleció en un accidente de tránsito en enero de 2008.

En el número 400, del 17 de julio de 2008, un muy extenso reportaje de siete páginas y 15 fotos (a cargo de Carlos Pazos) resulta ser una pintura de esos años del primer gobierno de izquierda: la llegada de las plantas de celulosa. Conchillas, en Colonia, soñaba con dejar el ostracismo y recuperar el esplendor de los primeros años del siglo pasado con el inicio de la construcción de la planta -entonces- de Ence. Hoy -desde 2014- funciona ahí la forestal Montes del Plata, que ha transformado esta localidad de apenas cientos de habitantes para producir 1,4 millones de toneladas de celulosa al año. Pero en ese entonces, era una población envejecida, silenciosa y con una imperiosa necesidad de resurgir.

Ernesto Talvi, 2010

Celeste mundial. La mitad del camino, el número 500, publicado el 1° de julio de 2010, traía en una entrevista a un economista de 53 años, que había sido guitarrista y cantante de una banda de "porteñada" cuando joven, veraneante de La Paloma, hincha de Peñarol y simpatizante de La Vela Puerca, No Te Va Gustar y El Cuarteto de Nos: el hoy canciller y líder colorado Ernesto Talvi.

Este ejemplar salió un día antes del histórico Uruguay-Ghana de los cuartos de final del Mundial de Sudáfrica 2010. El evento no fue ajeno a galería, aunque la nota escogida para el momento fue la de los hermanos Boateng, los primeros hermanos en jugar un mismo mundial pero para dos selecciones distintas: Jerome para Alemania y Kevin para Ghana. Este último saldría a la cancha con el número 23 del combinado africano en el partido más recordado por una generación de futboleros uruguayos. La celeste se ganó un "de más" ("Hacerse remeras con leyendas sobre los jugadores de la selección uruguaya", que estaba jugando un torneo bárbaro) y también un "de menos" ("Cortarse el pelo para parecerse a Muslera").

Cuando esta revista alcanzaba los 600 números, The Rolling Stones festejaba 50 años de vida. Era el 14 de junio de 2012 y faltaban casi cuatro años para que la leyenda británica diera una paliza de rock en el Estadio Centenario. El músico Mauricio Ubal, el plástico Ignacio Iturria, la bailarina Maitane Ascua y el empresario musical Luis Ara fueron convocados por la periodista Luisina Ríos para que dijeran qué representaban para ellos Sus Majestades Satánicas.

Pero la portada de esa edición correspondió al arquitecto Rafael Viñoly, entrevistado por Elena Risso. El diálogo giró en torno a su entonces proyecto de puente amigable con el ambiente sobre la Laguna Garzón, que sería finalmente inaugurado en diciembre de 2015. Las 22 balsas flotantes de madera, aluminio y fibra de vidrio hablaban de una nueva estructura y una nueva forma de concebir estas construcciones.

Rafael Viñoly, 2012

Este número también rendía honor a gente que rompía barreras. Se refería a Christine Quinn, la primera mujer al frente del Consejo Municipal de Nueva York, el organismo legislativo de la inmensa urbe, y la primera abiertamente gay. De hecho, el 19 de mayo se había casado con su pareja, Kim Catullo. Era precandidata demócrata a la Alcaldía de Nueva York, aunque finalmente las urnas le dieron la espalda. Pero era otra muestra de los nuevos tiempos: el 10 de abril de 2013, poco más de un año después, se aprobaba en Uruguay la Ley de Matrimonio Igualitario.

Dos años más tarde, para cuando la galería 700 salía a la calle, Uruguay se aprestaba para jugar el Mundial de Brasil. Por eso, en ese número del 22 de mayo de 2014, Carina Fossati y José Gallo ofrecían un itinerario turístico por todas las ciudades donde iba a jugar (o jugaría, según su suerte en el torneo) el equipo del Maestro Tabárez. Fortaleza, San Pablo y Natal estaban seguro, porque eran sus partidos del grupo para la primera fase. En un exceso de optimismo que la realidad celeste generaba (todavía faltaba para que a Luis Suárez se le ocurriera morder al italiano Giorgio Chiellini), el recorrido por Brasil alcanzaba una hipotética clasificación a la final, e incluía las bellezas de Río de Janeiro (donde Uruguay llegó, pero para ser eliminado en octavos), Recife, Salvador y Belo Horizonte.

La lesión e intervención quirúrgica de la rodilla de Luis Suárez era por entonces una causa nacional, sobrevolando varias secciones de la revista. Para contraponer tanta angustia futbolera, en la sección social se registraban los festejos de Defensor Sporting, que había logrado una inédita clasificación a las semifinales de la Copa Libertadores.

La palabra selfie ya estaba incluida en el lenguaje coloquial. De hecho, ese mismo año fue nombrada "palabra del año" por la Fundación del Español Urgente (Fundéu BBVA). Para los viajes, los turistas ya buscan otras experiencias: no se elegía un mamotreto réplica de Venecia en Las Vegas sino opciones como "hoteles tubo", de hormigón y con el menor impacto ambiental posible: en Ottensheim (Austria), el Valle de Tepoztlán y cerca de las ruinas de Tulum (ambos en México). Cuanto mayor contacto con la naturaleza, mejor.

Otras madres. De estos números redondos, el 800 es el único que fue una edición especial. La explicación es simple: salió a la calle el 12 de mayo de 2016, antes del Día de la Madre, una fecha muy especial para galería, siempre acompañada por propuestas de regalos de todo tipo y notas con enfoques no tradicionales. La modelo uruguaya Katja Thomsen había publicado su libro Mi vida como modelo, que lejos de ser un cuento de hadas, hablaba también del lado B de esa profesión: celos, maltratos, anorexia y de cómo vivir para contarlo, para luego recibirse de abogada sin dejar de atender a sus cuatro hijos. Hay un reportaje a la senadora Carol Aviaga y a la diputada Camila Ramírez, ambas del Partido Nacional, madre e hija.

Katja Thomsen, 2016

Quizá el texto de mayor valor documental habla de las 600 solicitudes para técnicas de alta complejidad de fertilización asistida que recibía por entonces el Fondo Nacional de Recursos. La ley respectiva, considerada ejemplar en la región, se reglamentó a fines de 2014 y permitió la concreción de un sueño largamente buscado por incontables parejas que querían tener hijos. "Que alguien se quede sin tener hijos por un tema económico es muy injusto. Hay que entender que cuando surge el deseo de ser madre no lo apagás más" , contaba la psicóloga Sandra Rodríguez, de la Fundación Dar a Luz, a la periodista Pía Supervielle. Fuera del tema central, ya eran tiempos en que las series pisaban fuerte y les disputaban terreno a las películas. En ese número, Feriados y Rotos y descosidos eran la respuesta uruguaya a ese fenómeno mundial.

La vuelta a lo simple. La portada de la edición 900 de galería, del 26 de abril de 2018, mostraba a un hombre corriendo por la playa. El running hacía mucho que se había impuesto como tendencia y los corredores amateurs salían a beberse los vientos hasta 30 kilómetros al día, según consignaba la nota de Bernardo Wolloch. Es deporte, salud y terapia a la vez. Lo simple también implica disfrutar en casa; la plataforma Netflix se volvió tan atractiva que empezó a producir sus propias series, películas y documentales, como Wild Wild Country, seis capítulos de una hora sobre la secta del gurú indio Osho, como escribía Florencia Pujadas.

El CEO de Uber -otro símbolo de esta era- para Latinoamérica, George Gordon, adelantaba para esta revista la llegada del servicio a todos los departamentos de Uruguay y de la variable Uber Eats. Y en el país más carnívoro del mundo había lugar para cosas nuevas con las carnicerías boutique.

El millar. Hoy galería llegó a su número mil. Cuando se había llegado al 100, su primera directora, Mónica Bottero, escribía que el arranque no había sido fácil. No solo se había comenzado en un país en recesión que aún no había llegado a lo peor, sino que quienes formaban parte de su staff, en su inmensa mayoría mujeres, habían pasado "a ser consideradas una manga de tilingas" por parte de periodistas más "serios" y tradicionalistas. No fue fácil que se pudiera entender -y todavía hoy, por insólito que parezca, hay gente que no entiende- el sentido humorístico de los "de más" y "de menos". También hablaba de rigor y profesionalismo en temas que iban desde la celulitis a una première de Hollywood u otras variantes del entretenimiento, temas de interés antes y ahora, ampliados con otros tópicos (urbanismo, personalidades, crónicas, violencia de género, sexualidad, arte) como cualquier lector habitual de la revista puede dar fe. La revista cambió para seguir siendo la misma, igual que el mundo.

Bottero, directora hasta junio de 2017 y hoy al frente de Inmujeres, escribía en ese lejano 5 de setiembre de 2002 lo que significaría llegar a un número mil: "Para entonces, seguro que todos los exámenes ya hará rato que los aprobamos".