Mayoría de adolescentes ingiere desayunos poco nutritivos

Este dato surge de una investigación de hábitos de desayuno realizada por la Asociación Uruguaya de Dietistas y Nutricionistas y financiada por la firma Bimbo, y que se realizó entre estudiantes de liceos privados de la capital.

Según esta encuesta, el 72% de los jóvenes desayuna de forma cotidiana, en tanto que el 22% lo hace algunas veces en la semana y el 6% no lo hace nunca, omitiendo de esta forma una comida fundamental para su desarrollo físico e intelectual.

Asimismo, sólo un 9% de los estudiantes logra un "desayuno ideal" que es aquel que incluye lácteos, frutas y panificados con baja cantidad de grasa y azúcares refinados, mientras que el 54% opta por alimentos de pobre o mala calidad, que carecen de nutrientes esenciales para el adolescente y promueven el exceso de peso, destacó un comunicado.

La investigación analizó una muestra de 696 liceales pertenecientes a instituciones privadas de la capital que concurren a cursos de 1º a 4º año en aras de representar a la totalidad de la población con esas características. Los investigadores relevaron datos sobre la frecuencia del desayuno, las bebidas y los alimentos consumidos, el tiempo invertido en la ingesta y el lugar en el que se realiza, así como mediciones antropométricas que permiten determinar el estado nutricional de los encuestados.

Las autoras del informe, Carolina de León e Isabel Pereyra, señalaron que lo más llamativo es la presencia del sobrepeso y la obesidad, que afectan a uno de cada diez jóvenes, siendo que, además, tres de cada diez están en riesgo de padecer sobrepeso.

En lo que respecta a los alimentos preferidos por los jóvenes, la investigación reveló que un 18% opta diariamente por el pan de molde, seguido por el pan flauta (15%) y los cereales o las barras de cereal (10%). Por su parte, cerca de un tercio de los encuestados indicó consumir alfajores, galletitas dulces y saladas, donas o magdalenas algunas veces en la semana.

Entre las bebidas que consumen se encuentra la leche, sola o con café, el té y la cocoa con un 52% de preferencia, la leche chocolatada con un 19% y los yogures o demás bebidas lácteas, jugos de frutas o licuados con un 6%. Agrupando los lácteos, se puede afirmar que el 75% de los adolescentes los ingieren de forma diaria. Por su parte, los refrescos y las bebidas colas son incluidos algunas veces por semana en el desayuno por el 19% de los liceales.

El informe destaca una tendencia cada vez mayor en los adolescentes a incorporar hábitos alimentarios caracterizados por el consumo excesivo de azúcares refinados, grasas saturadas, grasas trans, colesterol y alimentos que deterioran su salud o favorecen la malnutrición y la susceptibilidad a enfermedades crónicas no transmisibles como la diabetes, la obesidad, enfermedades cardiovasculares y cáncer, entre otras.

Asimismo, se notó un número significativo de adolescentes que no desayunan nunca o prescinden de esa comida varios días a la semana. Cerca del 50% de estos jóvenes aludió que no lo hacen por falta de tiempo o porque se despiertan tarde, mientras que el 43% afirmó no tener apetito durante la mañana.

Las autoras señalaron la necesidad de promover el desayuno como hábito diario, así como el consumo de lácteos parcialmente descremados, con poco agregado de azúcar, panificados con poca grasa y sal, y fruta fresca para satisfacer las necesidades de nutrientes específicos de la edad.