Kerstin Fritzl, hija/nieta de Josef Fritzl de 19 años, que pasó toda su vida en cautiverio, agoniza en el hospital al que fue ingresada días atrás, cuando la monstruosa historia del carcelero de Amstetten" salió a la luz.

Le faltan casi todos los dientes y presenta fallas en varios órganos, problemas de salud derivados de la genética defectuosa por el incesto.

"La joven está en condición crítica. Está sufriendo falla multiorgánica. Eso significa que sus chances de sobrevivir son muy bajas", dijo un vocero del hospital que atiende a la paciente que se encuentra en coma farmacológico.

En otro orden, se conocieron más detalles del caso que conmueve a la opinión pública mundial. La Policía austríaca reveló que el "carcelero de Amstetten" pudo haber amenazado a su hija y sus hijos-nietos, encerrados en un zulo subterráneo bajo su casa, con introducir gas en caso de que intentaran rebelarse en su contra.

Helmut Greiner, portavoz de la Policía local, dijo a la prensa que el técnico electricista jubilado Josef Fritzl, de 73 años, advirtió a su hija Elisabeth, a quien mantuvo encerrada y sometió a violaciones durante 24 años, de que, si a él le "ocurría algo", el calabozo subterráneo se llenaría de gas.

Este es sólo el más reciente de los detalles macabros de este caso, que ha conmocionado al mundo entero y que es considerado el delito más grave en la historia de Austria.

Además, una cuñada del acusado denunció en una entrevista a un diario local que Fritzl habría bajado "todas las mañanas a las 09.00 al sótano, supuestamente para dibujar unos planos para unas máquinas que quería vender".

"A veces también pasaba toda la noche allí. Ahora sabemos por qué", agregó la cuñada de Fritzl, en referencia a las sistemáticas violaciones sufridas por Elisabeth, de 42 años.

"Josef era un déspota. Siempre lo he odiado", agregó en declaraciones al periódico "Österreich" y destacó que hace 40 años Fritzl fue encarcelado por violación a una mujer, "y eso cuando ya tenía cuatro hijos con mi hermana".

El jubilado, que permanece en prisión preventiva, confesó tras su detención el sábado pasado ser el padre de los siete hijos de Elisabeth nacidos en el sótano en condiciones infrahumanas, de los que uno murió a los tres días.

Por otra parte, Fritzl viajó al menos dos veces a Tailandia de vacaciones y dejó a su hija sola durante semanas en el zulo subterráneo con tres de sus hijos.

Eso es al menos lo narrado por un amigo suyo alemán que le conocía desde 1973 y que le acompañó dos veces a ese país asiático, informó el diario germano "Bild Zeitung" en su página de internet.

El jubilado Paul H. cuenta, además, que estuvo en tres ocasiones en la casa de Fritzl en Amstetten (a 130 kilómetros de Viena), la última vez en 2005, cuando se sentaron en la terraza y notó que a los otros tres niños, hijos del incesto del padre con la hija y que había adoptado el matrimonio, se les había prohibido ir al sótano.

Según el rotativo gratuito "Heute", los investigadores austríacos centraron las pesquisas en un viaje de Fritzl a Pattaya, una playa tailandesa conocida por su abundante oferta sexual, entre el 6 de enero y el 3 de febrero de 1998.

En esas fechas, de acuerdo con la reconstrucción actual de los hechos, su hija se hallaba cautiva con tres hijos en el calabozo, cerrado herméticamente con una puerta maciza de acero y hormigón.

Por otra parte, un grupo de guardias privados vigila hoy la entrada al hospital donde están ingresadas siete de las víctimas, ante los reiterados intentos de fotógrafos y reporteros de entrar en la clínica, indicó el portavoz del "holding" de los centros sanitarios regionales de Baja Austria, donde está Amstetten, Klaus Schwertner.

Los guardias de un servicio privado garantizarán la seguridad de Elisabeth Fritzl y de seis de sus hijos, además de su madre Rosemarie, esposa de Josef.

Según el portavoz, entre otros incidentes, el martes un equipo de televisión logró entrar "hasta el edificio de la dirección" del hospital Amstetten-Mauer, donde las víctimas son atendidas por un equipo de médicos y psicólogos desde su liberación, el pasado fin de semana.

Delitos anteriores

Josef Fritzl, de 73 años y actualmente en prisión preventiva por haber encerrado y abusado de su hija durante 24 años, cometió varios delitos sexuales en la década de los 60, según actas de la policía y la justicia encontradas por un diario austríaco.

Según el rotativo regional del «Oberösterreichischen Nachrichten» (OÖN), la documentación revelaría que Fritzl fue arrestado por violar a una mujer, cuando ya estaba registrado por otro intento de violación y un delito de exhibicionismo.

«Un Informe Anual de la Policía de Linz del año 1967, al que pudo acceder en exclusiva el OÖN, demuestra que Josef F. fue detenido ese año como agresor sexual», señala el rotativo. «Desde hace días las autoridades de Baja Austria aseguran no saber nada de eventuales delitos penales pasados del sospechoso en el caso de incesto de Amstetten. Pero desde el miércoles es seguro que saben de los casos de 1967», añade.

Entre otros, asegura que «existe aún» un acta judicial sobre una violación de Josef Fritzl a una mujer de la ciudad de Linz, capital del Estado federado de Alta Austria, en octubre de 1967, y recuerda que el OÖN publicó el martes pasado una entrevista con esa víctima.

El delito ha prescrito, pero el acta se encontraba en el Archivo Regional de Alta Austria, donde normalmente se guardan los documentos del Tribunal Regional, y allí quedan abiertos para que la población pueda acceder a ellos por un plazo de 50 años.

Según el diario, el miércoles pasado el citado acta fue entregado a la Fiscalía de Sankt Pölten, encargada de las investigaciones sobre el peor caso de abuso e incesto conocido en Austria, pero ni el Archivo ni las autoridades jurídicas o policiales han confirmado este hecho hasta ahora.

«Naturalmente que estos hechos pasados y documentados tienen una relevancia en el caso actual. Pero aún no sabemos lo que hay en ellos (en los documentos) y tenemos que estudiarlos atentamente», señaló una fuente de Sankt Pölten (capital del Estado de Baja Austria) al diario. En el Informe Anual de la Dirección de Policía de Linz correspondiente al año 1967, se incluye información de que en septiembre de ese año Josef Fritzl intentó arrastrar a un bosque y violar a una paseante de 21 años.

Sobre ese caso informó entonces el propio OÖN, el 27 de octubre de 1967, en un artículo en el que, además, se recuerdan otros delitos anteriores que habría perpetrado el mismo Fritzl.

«Para la Policía de Linz el hombre ya no era un desconocido debido a dos delitos: F. ya estaba registrado en la policía por exhibicionismo una vez y otra por intento de violación», cita el OÖN su propio artículo de hace 41 años.

Por otro lado, otra mujer, de 61 años y también de Linz, llamó el miércoles al OÖN y aseguró haber sido asimismo violada en 1967 por Fritzl, a quien dice haber reconocido al cien por cien, si bien pidió que no sea revelada su identidad y explicó que «por vergüenza» nunca hizo una denuncia a la policía.

Josef Fritzl fue detenido el pasado domingo en la pequeña localidad austríaca de Amstetten, acusado de haber encerrado en un sótano durante 24 años a su hija Elisabeth, que hoy tiene 42 años, haberla violado sistemáticamente y engendrado siete hijos.

Con datos de EFE