Larga vida: científicos hallan clave de longevidad de mujer que vivió hasta los 117 años

Un estudio de ADN de la supercentenaria española María Branyas Morera, fallecida en agosto de 2024 a los 117 años, revela que la genética jugó un papel fundamental en su longevidad.

Los análisis indican que los genes de la mujer permitieron que sus células se comportaran como si fueran 17 años “más jóvenes” de lo que realmente eran. Además, su microbiota, es decir, los microorganismos presentes en el intestino, era similar a la de un bebé.

Las revelaciones, citadas por The Guardian, fueron realizadas por un equipo de investigación dirigido por el profesor de genética de la Universidad de Barcelona Manel Esteller, uno de los mayores expertos en envejecimiento.

Las conclusiones dan la razón a la española, que entonces atribuyó su longevidad a la “suerte” y a la “buena genética”.

Pero la composición genética “especial” de María Branyas Morera no hizo el “trabajo” sola. Los investigadores señalan que también contribuyeron (y mucho) las decisiones de estilo de vida saludable que la mujer tomó a lo largo de su vida, incluida la de optar por una dieta mediterránea.

María tampoco bebía alcohol ni fumaba, disfrutaba de pasear y se rodeaba constantemente de familiares y seres queridos, lo que aparentemente la ayudó a evitar el deterioro físico y mental, explicaron los investigadores.

María Branyas Morera nació el 4 de marzo de 1907 en San Francisco, Estados Unidos, después de que sus padres abandonaran España. En 1914, tras un periplo por Nueva Orleans y lanzar, ante las costas gallegas, las cenizas de su padre, fallecido en el viaje en barco que los llevaba de regreso a Cataluña, María vivió en varias localidades catalanas antes de ingresar, hace más de 20 años, en la residencia Santa María del Tura, en Olot, donde entonces residía una amiga y prima de su marido.

Sobrevivió a la pandemia de gripe española en 1918, a dos guerras mundiales, a la Guerra Civil Española y al covid-19.